El 25 de marzo se celebra el Día Internacional del Gofre, un postre que, tal y como lo define la RAE, es un "pastel de masa ligera, cocido en un molde especial que le imprime un dibujo en forma de rejilla". Un término que, según explican desde la Organización de Consumidores y Usuarios, popularmente conocida como la OCU, procede de la palabra francesa “gaufre”, aunque también son conocidos como “waffle", que es la palabra en inglés para designar a estos pastelillos.
Un postre rápido de hacer y al que ¡muy pocos se resisten! Son rápidos de hacer y se puede disfrutar con piezas de frutas, miel, chocolate y hasta productos salados. Un amplio mundo de posibilidades que no se debe pasar por alto.
Por ello, no está de más conocer la receta de gofres, ¡cualquier excusa es buena para darse un pequeño homenaje!
Ingredientes
- 250 g de harina.
- 200 ml leche entera.
- 10 g de levadura en polvo.
- 2 huevos medianos.
- Una pizca de sal.
- 100 g de mantequilla a temperatura ambiente o ya derretida.
- 100 g de azúcar.
Cómo hacer gofres caseros en solo 4 pasos
Mezclar los ingredientes
El primero de los pasos que hay que dar para hacer gofres caseros es mezclar la harina, la leche, la levadura en polvo, los huevos, la sal, la mantequilla y el azúcar.
Preparar la gofrera
Después de mezclar los ingredientes, es momento de hacer uso de la gofrera, pequeño electrodoméstico enfocada para preparar gofres o waffles. Enchufar la gofrera y, tal y como detallan desde la OCU, cuando la placas estén calientes, verter la masa en el centro de cada rejilla inferior. A continuación, cerrar la rejilla de arriba sobre la de abajo. El calor de la gofrera hará crecer la masa por toda la rejilla adoptando su característica forma.
Abrir la gofrera y retirarlos
Cuando los gofres estén listos, la máquina se apagará o te avisará con un testigo luminoso. Abrir la gofrera y retirarlos con un utensilio de plástico o madera para no dañar la superficie antiadherente.
Servir y personalizar los gofres
Colocar los gofres en un plato y cubrirlos con los ingredientes que se prefiera. Sirope de chocolate, nata, miel, mermelada, frutas, yogur, helado... hay opciones de todos los colores y para todos los gustos.
¿El resultado? Un buen gofre dorado y crujiente por fuera, y esponjoso en el interior acompañado de los ingredientes que más gusten.
