Adiós a la suciedad y al mal olor del lavavajillas: el método definitivo de una experta en limpieza
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El lavavajillas es uno de los electrodomésticos "sin los que no podemos pasarnos", tal y como así lo indican los especialistas de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
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El lavavajillas, uno de los electrodomésticos "sin los que no podemos pasarnos"
Una aparato que, para que funcione como el primer día, es necesario realizar una limpieza periódica de su interior, ya que, según explican, debido a los restos de grasa, de comida y a las impurezas del agua puede empezar a oler mal o a dejar restos de suciedad en el menaje.
Y es que teniendo en cuenta que el lavavajillas está diseñado para optimizar la limpieza de piezas como platos, tazas, vasos, cubiertos y cacerolas, entre otros, es importante cargarlo ordenadamente poniendo cada cosa en su lugar previsto, igual que ordenas los alimentos en el frigorífico. Además, para evitar malos olores, atascos, etc. hay que hacer una limpieza interior periódica.
El método de una experta en limpieza para eliminar la suciedad y el mal olor del lavavajillas
Con más de 569.000 visualizaciones y más de 7.000 me gustas, la publicación de la experta en decoración y creadora de contenido María Fernández, con nombre de usuario @marianordichouse y que cuenta con más de un millón y medio de seguidores en Instagramy más de 450.000 seguidores en TikTok, no ha dejado a nadie indiferente.
"Para limpiar el profundidad el lavavajillas retiraremos la cesta de abajo, desmontaremos el filtro, la rejilla y las aspas, las limpiaremos en el fregadero con agua caliente y unas gotas de Fairy. Frotaremos muy bien con el estropajo hasta que no queden restos de comida y enjuagamos. En estas piezas es donde se acumula la suciedad, y es el motivo de que el lavavajillas huela mal. Para limpiar la puerta y el interior, vamos a utilizar el Cif, vertemos un buen chorro por la puerta y el interior y frotaremos con un estropajo para superficies delicadas, insistiendo en todos los recovecos y los rincones del lavavajillas. Con la ayuda de una jarra, enjuagaremos muy bien los restos de jabón, nos tiene que quedar perfecto. Una vez limpio, volvemos a colocar todas las piezas. Para terminar la limpieza, vertemos una taza de bicarbonato en el fondo para eliminar olores. En la cesta superior ponemos un vaso y lo llenamos de vinagre de limpieza. El vinagre de limpieza elimina la cal y los restos de grasa. Para que huela de maravilla, parte un limón por la mitad y colócalo en la cesta. Ponemos un lavado a 60 grados con el lavavajillas vacío. Limpio, sin olores, como nuevo y sin usar productos químicos. Llenamos el depósito de la sal y del abrillantador y colocamos un ambientador de limón. Para abrillantar el acero inoxidable lo hago con una mezcla a partes iguales de agua y vinagre", explica de manera detallada la experta María Fernández.
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