Circulas con tu coche por una autovía o una autopista y te encuentras el típico conductor abonado con su vehículo al carril izquierdo. Da igual que tú estés alcanzando al turismo que llevas delante, que tendrás que frenar para que pase él.

Muchos automovilistas interpretan que ese carril es el de los vehículos rápidos y que pueden circular por él todo el tiempo que quieran siempre y cuando vayan al límite máximo de velocidad autorizado en dicha vía.

Pues bien, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), seis de cada diez conductores utilizan el carril izquierdo de forma indebida, ya que no está permitido circular de forma continuada por él. De hecho, el Reglamento General de Circulación especifica que los vehículos deben circular por el carril situado siempre más a su derecha.

La norma no solo establece cómo se debe usar este carril izquierdo, sino que también fija qué sanciones te pueden poner si no la respetas. En este caso, utilizar el carril izquierdo en condiciones no reglamentarias puede suponer una multa de 200 euros y no conlleva pérdida de puntos. 

En el caso de los conductores acosadores, esos que no respetan la distancia de seguridad y, al límite o rebasando la velocidad permitida, presionan al que llevan delante para que abandone el carril izquierdo y les permita continuar, la norma sí que contempla, además de la multa de 200 euros, la pérdida de cuatro puntos.

También está castigado con 200 euros adelantar por la derecha a esos conductores que no abandonan el carril izquierdo; en vías de dos o más carriles solo podemos adelantar a los vehículos que circulan por nuestra derecha.

Las situaciones en las que sí está permitido utilizar el carril izquierdo en autovías o autopistas son:

- Adelantar a vehículos que circulen más lento. Debemos regresar al carril derecho una vez finalizada la maniobra.

- Facilitar la incorporación de un vehículo que entre en la vía por el lado derecho.

- Tomar una bifurcación o desvío en el lado izquierdo. 

Coches que circulan por una autopista vistos a través de un espejo retrovisor. Pixabay

Métodos de vigilancia de la DGT

El control sobre el uso que hacen los conductores del carril izquierdo no se puede hacer de forma automatizada ya que no hay radares capaces de realizar esa labor. Sin embargo, la DGT utiliza para ello distintas herramientas como son los controles de carretera, tanto con vehículos rotulados como camuflados, como los helicópteros Pegasus y los drones de Tráfico.