MOSÚ. El primer ministro ruso, Vladímir Putin, visitó hoy una isla polarrusa, donde subrayó la importancia del Ártico para la seguridad y laeconomía de Rusia y se interesó por el programa de protección del osopolar.

Putin acudió a la pequeña isla Tierra de Alejandra del archipiélagoTierra de Francisco José, en el océano Glacial Ártico, donde visitó elpuesto fronterizo más septentrional del país y asistió a unosejercicios de sus efectivos con socorristas y médicos del Ministerio deSituaciones de Emergencia.

"Aquí se garantizan la seguridad y la capacidad defensiva de Rusia,pues en estas latitudes árticas se encuentran bases de nuestra flota ypasan rutas de las patrullas de la aviación estratégica", declaróPutin, según un comunicado del Gobierno.

Subrayó asimismo el peso económico del Ártico, que según expertosalberga la cuarta parte de las reservas mundiales de hidrocarburos,como el yacimiento Shtokman, uno de los más grandes del mundo, situadoa 300 kilómetros de la costa rusa del mar de Barents.

Agregó que por el océano Glacial Ártico -sobre la soberanía de partede cuyo lecho Rusia presenta reclamaciones territoriales- pasa una rutade transporte marítimo que adquiere creciente importancia a medida quelos hielos se derriten a causa del cambio climático.

El dirigente ruso se desplazó además en un todoterreno a una basecientífica del Instituto de problemas de ecología y evolución cuyosespecilistas estudian al oso polar con el fin de incrementar lapoblación de esa especie en peligro de extinción.

Los científicos explicaron a Putin que el oso blanco necesitaurgente protección pues su hábitat está seriamente amenazado por eldeshielo y la actividad del hombre, incluida la caza furtiva.

Según especialistas, en el mundo se conservan actualmente unos25.000 osos polares, de los que unos 6.000 habitan la zona rusa delÁrtico.

De acuerdo con la nota oficial, Putin ayudó a los especialistas amedir y a pesar a un oso recién capturado y le colocó personalmente uncollar dotado con un sistema de localización por satélite que ayudará aestudiar sus rutas de migración.

Por otra parte, el primer ministro subrayó la necesidad de realizaruna "limpieza general" en el Ártico, que la actividad militar ycomercial ha convertido en un "basurero" que supera en hasta seis veceslos niveles permitidos de contaminación.

Según un estudio realizado entre 1995 y 2005, en el archipiélagoTierra de Francisco José se encuentran abandonados más de un millón detoneles metálicos vacíos, otros 250.000 con decenas de miles detoneladas de gasóleo y aceites, así como restos de aviones, radares yotros equipos que ocupan una superficie de cien hectáreas.

"Debemos estudiar ese problema y recoger sin demora todos estosresiduos, pues la naturaleza aquí es muy frágil y la elevación de latemperatura en apenas dos o tres grados puede acarrear problemas másgraves de los que afrontamos ahora", dijo Putin.