túnez - El grupo yihadista Estado Islámico (EI) se atribuyó ayer el atentado de ayer en Túnez, en el que murieron 18 turistas extranjeros, además de tres tunecinos y dos terroristas, en el primer ataque que reivindica en ese país del norte de África. Fuentes de Seguridad confirmaron que se había practicado nueve detenciones y se interrogaba a cuatro personas por su presunta participación en los hechos y a otras cinco por haber dado apoyo y cobertura a la célula.
En una grabación de audio, difundida en Internet y cuya autenticidad no pudo ser verificada, EI afirmó que dos de sus combatientes, a los que que el Gobierno tunecino ha identificado como Yassine Abidi y Hatem Jachnaoui, fueron los autores. La organización explicó que los dos terroristas, a los que describió como “caballeros de Estado Islámico”, perpetraron el ataque con armas automáticas y granadas de mano en el Museo del Bardo, ubicado en el complejo de Seguridad del Parlamento tunecino.
Allí, los yihadistas “cercaron a un grupo malicioso de ciudadanos de países cruzados”, quienes fueron “seducidos por los apóstatas (el Gobierno tunecino), que les adornó la tierra de Túnez para convertirla en un foco de su infidelidad y libertinaje”, agregó EI en su grabación. En la operación, según el grupo radical, “decenas de cruzados y apóstatas” murieron hasta la irrupción de las fuerzas de seguridad. EI concluyó su mensaje con la amenaza de que efectuará más ataques en la “tierra musulmana de Túnez”, y que esto no ha sido más que “la primera gota de lluvia”: “No disfrutaréis ni de paz ni de seguridad”.
El atentado se produjo en la mañana del martes cuando un joven de aspecto occidental ametralló un autobús en el que viajaban cerca de 40 turistas hispanohablantes, viajeros de un crucero en el Mediterráneo que había hecho escala en Túnez.
Minutos después, al menos otros tres hombres atraparon a un numeroso grupo de rehenes en el interior del Museo del Bardo, el más importante de Túnez, y se atrincheraron en una zona ajardinada entre el citado museo y el edificio del Parlamento.
En los últimos meses, las fuerzas de seguridad de Túnez han detenido a centenares de sospechosos yihadistas, algunos de ellos acusados de pertenecer a Katibat de Okba Ibn Nafáa”, aliado de Ansar Al Sharía, filial de Al Qaeda en Túnez, ante el temor de que EI se expandiera por su territorio. Este pequeño país comparte frontera con Argelia y con Libia, donde existen filiales de Estado Islámico.- Efe