parís - La mujer del ex primer ministro francés François Fillon cobró dos paquetes de indemnizaciones por despido de la Asamblea Nacional que sumaban un total de 45.000 euros, según una información de la revista Le Canard Enchaîné, que ha sido la encargada de destapar el escándalo de los supuestos empleos ficticios de Penelope Fillon.

El semanario satírico precisa que la mujer percibió los primeros 16.000 euros en agosto de 2002, que la indemnización le fue concedida pese a que un mes antes había encontrado ya otro trabajo como asistente parlamentaria con el diputado que sustituyó a su marido en la Asamblea, Marc Joulaud. Los otros 29.000 euros los recibió en noviembre de 2013 y en concepto de “primas” al cesar su último contrato.

Fillon refutó en un comunicado estas informaciones del semanario y explicó que esas sumas estaban incluidas en el salario medio ya difundido públicamente de 3.677 euros netos mensuales.

“El Canard Enchaîné no solo intenta cuestionar, falsamente, el cálculo del salario neto medio de mi mujer, sino que comete numerosos errores en el análisis de las informaciones que figuran en las nóminas”, dijo el candidato de la derecha para las presidenciales del 23 de abril.

Le Canard Enchaîné cifró en 900.000 el dinero cobrado por la mujer del aspirante presidencial gracias a una serie de empleos que en realidad no llegó a prestar, principalmente por su supuesta labor como asistente parlamentaria de su marido y de quien le sucedió en el escaño. Por su parte, Le Parisien escribió que mientras trabajaba como asistente de Fillon en la Asamblea Nacional también lo hacía como especialista literaria en la revista Revue des deux mondes.

En cuanto a esto, el abogado de François Fillon, Antonin Lévy, consideró que no hay “ninguna incompatibilidad” y que “es cuestión de organización del tiempo”, según Le Parisien, que se pregunta si Fillon quiso esconder el trabajo de su mujer como asistente en ese periodo.

De la misma manera, el diario recuerda que los diputados se vieron obligados a rellenar a partir de enero de 2014 una declaración de intereses y patrimonio ante la Alta Autoridad de la Transparencia de la Vida Pública, y que fue solo dos meses antes, en noviembre de 2013, cuando se puso fin al contrato de Penelope en la Asamblea.

Ante esta situación, el candidato conservador a la presidencia de Francia, François Fillon, reunió ayer a los parlamentarios de su partido para recabar su apoyo antes de volver a su campaña electoral.

zanjar la polémica Hoy, Fillon se dirigirá a los franceses en una carta publicada por los principales diarios regionales en la que tratará de zanjar con nuevas explicaciones la polémica desatada por el escándalo objeto de una investigación judicial.

El ex primer ministro adelantó a los diputados del partido Los Republicanos su intención de difundir la misiva, e insistió en que carece de un plan B, sino que solo tiene “un plan A, de ataque”.

François Fillon adelantó a los diputados del partido su intención de difundir la misiva, e insistió en que carece de un plan B, sino que solo tiene “un plan A, de Ataque”.

En una masiva rueda de prensa el lunes en su sede de campaña, Fillon trató de argumentar que los trabajos como asistentes parlamentarios de su esposa y sus hijos eran “legales y transparentes” y que su remuneración estaba “justificada”, pese a que admitió que desde el punto de vista ético pudo haber cometido un error al “emplearles”. Además, denunció ser víctima de un “linchamiento mediático” con la connivencia, arguyó de forma tácita, de ciertos sectores del Gobierno socialista. - Efe/E.P.