Las autoridades de la autoproclamada República Popular de Lugansk (RPL), anexionada a Rusia tras un referéndum de adhesión, han informado de que, desde hace una semana, se han eliminado los controles fronterizos con el resto del territorio ruso.

Según ha informado el gobernador de la RPL, Leonid Pasechnik, "todos los puestos de control han sido abolidos" y los guardias fronterizos que siguen en funciones tan solo se limitan a "proteger la propiedad", según recoge la agencia rusa TASS.

El gobierno de la región ha cumplido así con las instrucciones del Comité Estatal de Aduanas de la RPL, que había llamado a suprimir los puestos fronterizos con las regiones rusas de Belgorod, Voronezh y Rostov.

El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó la anexión de las regiones ucranianas de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia legitimado en los resultados de una serie de referéndums de adhesión que, sin embargo, no fueron reconocidos ni por Ucrania ni por gran parte de la comunidad internacional.