El Gobierno de Serbia ha abierto este lunes un plazo de un mes para que quienes posean armas de fuego sin licencia las entreguen voluntariamente sin consecuencias penales, en respuesta a los dos tiroteos que la semana pasada dejaron 17 muertos y 21 heridos, en uno de los países del mundo con mayor número de armas en circulación.

El Ministerio del Interior anunció en un comunicado que quienes depositen en comisarías antes del 8 de junio armas, municiones o explosivos que tienen de forma ilegal no serán sancionados ni tendrán que explicar el origen de ese material.

Las autoridades ya habían advertido previamente que, tras ese plazo voluntario, se aplicarán "brutales sanciones" a quienes conserven armas sin la correspondiente licencia

El plan del Gobierno es reducir en un 90 % el número de personas que actualmente poseen armas, aumentar los controles y elevar las sanciones para quienes las tengan de forma ilegal.

El pasado día 3, un niño de 13 años mató en un colegio de Belgrado a ocho de sus compañeros y a un guardia de seguridad, e hirió a una profesora y seis alumnos, antes de ser detenido.

Cometió el crimen con una pistola, propiedad de su padre, que tenía licencia para el arma, y al que el menor solía acompañar a prácticas de tiro.

En otro tiroteo, menos de 48 horas después, un joven de 21 años mató a ocho personas e hirió a otras 14 cerca de la localidad de Mladenovac, en el centro del país.

La Policía arrestó a agresor y encontró en su casa varias armas y abundante munición.

760.000 armas en Serbia

En Serbia, con 6,8 millones de habitantes, hay unas 760.000 armas en manos de unas 400.000 personas, una de las mayores ratios del mundo. El Gobierno quiere reducir esa cifra a un máximo de 40.000.

Entre las medidas, también se prevé introducir una moratoria de dos años a la emisión de licencias de posesión y tenencia de cualquier arma, incluidas las de caza.

Hoy en unas 1.800 escuelas de Serbia ha sido reforzada la presencia preventiva de la policía, que ha pedido a los alumnos y los padres avisar de cualquier problema de la seguridad.

Para esta tarde, la oposición parlamentaria ha convocado una protesta bajo el lema "Serbia contra la violencia" para exigir al Gobierno más dimisiones, tras la del ministro de Educación, así como otras medidas para prevenir la violencia en el país.

Dimite el ministro de Educación

El ministro de Educación de Serbia, Branko Ruzic, ha presentado su renuncia al cargo este domingo, después del tiroteo en el colegio de Belgrado.

En una carta dirigida a la primera ministra del país, Ana Brnabic, Ruzic ha asumido su responsabilidad como cabeza del Ministerio de Educación y ha comunicado su decisión de dimitir "como hombre responsable y educado, (...) como padre y ciudadano de la República de Serbia".

"La dimisión es un acto personal pero también político, en las sociedades democráticas desarrolladas es un signo de fortaleza y en nuestra región, muy a menudo, es un signo de debilidad. Que el público juzgue", ha aseverado el ya exministro.

En la misiva también explica que tomó la decisión tras conocer el suceso, y que se lo había comunicado en ese momento a la mandataria, pero ha esperado hacerla pública hasta después del periodo de luto nacional declarado en el país.

"Serbia necesita sabiduría, serenidad, amor y empatía, de ninguna manera incitar conflictos (...), sin importar de qué lado vengan", ha añadido.