El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha iniciado un proceso para recuperar la imagen de líder fuerte perdida al compás de la revuelta del Grupo Wagner, el mayor desafío político sufrido por el mandatario desde su llegada al poder, al tiempo que crecen las dudas sobre el grado de penetración que pudo tener en Moscú el motín del oligarca Yevgeni Prigozhin, también en el círculo más cercano al Kremlin.

No obstante, este proceso para recuperar la imagen de líder fuerte de Putin no parece haber empezado con buen pie, a tenor de las burlas que ha generado en las redes sociales el extraño dibujo que el presidente ruso realizó en su primera aparición pública tras la rebelión del Grupo Wagner.

Durante una visita a una feria tecnológica en Moscú, Putin fue invitado a usar una pizarra tecnológica en la que se podían ver números y fórmulas matemáticas. El presidente de Rusia cogió un rotulador y ante la sorpresa de los presentes, lo que dibujó fue un extraño dibujo de un rostro. Algunos apuntan a que se trata de un autorretrato, mientras otros señalan que quizá intentaba dibujar a Bob Esponja. Por ahora, el Kremlin no ha dado ninguna explicación sobre el significado o lo que representa el dibujo, que fue muy aplaudido por las personas que acompañaban a Putin en la feria tecnológica.