Corpas, al frente de la Conservación del Patrimonio Histórico de Navarra

tudela. La Fundación para la Conservación del Patrimonio Histórico Cultural se rige por un patronato presidido por el consejero de Cultura y Turismo del Gobierno de Navarra, Juan Ramón Corpas. Su gerente es la ex concejal del Ayuntamiento de Pamplona Maribel Beriáin y actúa como secretaria Inés Tabar, directora del Servicio de Patrimonio Histórico del mismo departamento. El patronato, como esgrimen desde la propia Fundación, dispone de diferentes competencias como adquirir, poseer, conservar, administrar, disponer, enajenar, gravar y permutar bienes de todas clases; contraer obligaciones y celebrar contratos de cualquier índole". En Junta de Gobierno, el centro cultural Castel-Ruiz decidió en 2006 conceder a este organismo una subvención de 100.000 euros para la exposición Tudela. El legado de una catedral. El presupuesto de gastos presentado fue de 616.982 euros y el de ingresos 617.000. Del total de la subvención, se adelantó el 75% y el resto quedó pendiente hasta que se justificase el destino de los fondos. La sentencia del Contencioso Administrativo no sólo ve injustificado el 25% que restaba sino que eleva la cifra que la Fundación recibió sin aportar facturas, certificados de la Seguridad Social o identificaciones legales de proveedores, entre otros, hasta los 45.916 euros.

Entre los objetivos del patronato dirigido por Corpas se resalta, tras el de la difusión y divulgación, el de la "obtención de recursos económicos de cualesquiera personas físicas y/o jurídicas, públicas y/o privadas mediante subvenciones o ayudas de cualquier naturaleza, precisas para el adecuado desarrollo de los fines propios de la Fundación". En este empeño, el propio Corpas, en la página web de la Fundación, da la bienvenida asegurando que el organismo "está llamado a jugar un papel importante, aunando esfuerzos, coordinando recursos y agilizando procedimientos". Sin embargo, la sentencia que da la razón al recurso de NaBai pone en entredicho dichos procedimientos y da por bueno el informe de Intervención que en su día alertaba del incumplimiento de la Ley de Subvenciones por parte del Ayuntamiento de Tudela, gestionado por UPN, en favor de la ayuda a la Fundación.