La Milagrosa se opone a la proliferación de bajeras de jóvenes

pamplona. Los vecinos de la zona situada entre las calles Sangüesa y Blas de Laserna del barrio de La Milagrosa solicitaron la semana pasada al Ayuntamiento que declare parte del barrio "zona saturada de piperos de ocio" para evitar la proliferación de bajeras ocupadas por grupos de jóvenes. Declaran que la alta concentración de estos locales provoca un gran malestar al vecindario, ya que las bajeras no reúnen las condiciones adecuadas para el uso que se les da por parte de sus ocupantes, al tratarse de antiguos comercios o negocios de hostelería. Además, en algunos casos, como el de la calle Joaquín Larregla, el número de piperos asciende a nueve en una vía de apenas 120 metros de longitud.

A las molestias ocasionadas por ruidos provenientes de música, videojuegos, persianas o gritos se suman varios altercados que han tenido lugar recientemente, y los vecinos destacan que todo esto sucede "en las sensibles horas de madrugada".

Arantxa, una de las vecinas afectadas, señala que "a las seis de la mañana esto parece un after", y denuncia que los jóvenes "salen a grito pelao, pegan bocinazos...".

Los vecinos solicitan también "que se conceptúen las bajeras como establecimientos de ocio nocturno, y actualizar una normativa que incluya su insonorización y horario". Asimismo, también demandan "más control policial", ya que, según explica Arantxa, "da la sensación de que, como es el barrio que es, nos tienen abandonados".

Los vecinos acompañaron su solicitud de 124 firmas y ahora esperan la respuesta del concejal de barrio, Valentín Alzina, a quien encontraron "receptivo" a actuar para solucionar el problema.