"MARÍA, ponte ahí, ¡con los toldos detrás y el Ratón de Getaria al fondo!". Ésa es una de las frases típicas que se repiten durante la temporada estival en Zarautz, entre los turistas que se acercan a disfrutar de la villa costera. Y es que los característicos toldos de la playa, a rayas, unos blancos y azules y otros blancos y verdes, visten el arenal desde hace dos siglos y son uno de los atractivos para los visitantes, a la hora de querer inmortalizar su estancia. Ya lo supo representar en el año 1910 el pintor Joaquín Sorolla en su obra Bajo el toldo. Pero a partir de ahora, ya no se podrá conseguir la ansiada postal en 500 metros de la playa. La Dirección de Costas del Ministerio de Medio Ambiente ha comunicado al Ayuntamiento de Zarautz la prohibición de colocar toldos en parte de la zona oeste, entre Muskaria y el palacio de Narros.
Según informó ayer el Consistorio, a través de una nota de prensa, la razón de esta medida es que para instalar estos elementos es necesario un espacio de seis metros libres de arena en pleamar, circunstancia que no se cumple en dicha zona. El Consistorio zarauztarra recurrirá esta decisión que, no obstante, ya se comenzó a aplicar ayer, en el arranque de los servicios de la presente temporada. "El Ayuntamiento ha intensificado en los últimos meses sus esfuerzos para evitar esta medida con reuniones y presentación de informes que aconsejan retrasar esta prohibición, pese a lo cual, el Servicio de Costas ha optado por aplicarla", detalló la Administración local. En este sentido, los responsables del Consistorio consideran "poco explicable" esta medida, "cuando hasta ahora en pleamar se adoptaba una solución con buenos resultados como era retirar los toldos y dejar tan solo los palos". "Esta práctica ha sido hasta ahora bien aceptada por los afectados y por la empresa concesionaria del servicio", añadió.
"difícilmente entendible"
Un estudio pendiente
Los 750 toldos que visten la playa son controlados desde tres puestos diferentes: cerca de la plaza de la Munoa, 350; al lado de la escultura La Dama, otros 300; y en el desierto pequeño, otros 100. La medida ha hecho desaparecer 200 toldos cercanos a Munoa. El Consistorio apela al carácter tradicional de los toldos, que se instalan en la playa desde el siglo XIX. "Su retirada en la zona oeste, junto al Casco Antiguo, es difícilmente entendible, ya que la ciudadanía tiene interiorizada y asumida su imagen y su servicio como un icono", recordó. "El vacío que dejen estos toldos será ocupado por una sucesión de sombrillas sin control alguno que no beneficiarán ni al Ayuntamiento, ni al concesionario, ni a la población", insistió.
En los diversos contactos mantenidos, el Ayuntamiento recordó a Costas que actualmente Azti - Tecnalia desarrolla en la zona un estudio que aportará los datos necesarios para determinar la posibilidad de instalar toldos en el oeste de la playa y que aún no se encuentra finalizado. El instituto tecnológico ha instalado videocámaras en el Malecón que captan imágenes instantáneas para cuantificar diversos parámetros.
El objetivo del estudio es realizar un seguimiento de diversos factores como la línea de la playa, el oleaje y su influencia en el litoral o el uso del recinto playero con el fin de obtener una visión global de la zona y de su comportamiento que permita, entre otras cuestiones, decidir si es posible instalar toldos y determinar en qué puntos de la playa. En este sentido, el Ayuntamiento zarauztarra solicitó a Costas esperar a conocer los resultados, pero no ha obtenido una respuesta positiva.
A pesar de que finalmente este año se reducirá el número de toldos instalados, la nueva Corporación que se constituirá el 11 de junio deberá decidir si presenta un nuevo recurso y tratar de que esta decisión sea reconsiderada para próximas temporadas playeras. De momento, el Ayuntamiento intentará reubicar a las personas perjudicadas por la medida.
En las auténticas casas estivales para muchos de los usuarios que cada año se dan cita en uno de los toldos a rayas con vistas al mar se dan cita tanto a zarauztarras (el 70% de los usuarios) como a foráneos. Es por ello que ayer, además de los nuevos socorristas de la empresa Sport Salvament, llamaba la atención no ver las casetas en 500 metros.