Dicastillo retrocede en el tiempo
INAUGURA LA RECONSTRUCCIÓN DE SU FUENTE DEL SIGLO xvi, COINCIDIENDO CON san blas y la fiesta de los donantES
dICASTILLO retrocedió ayer varias décadas en el tiempo con la inauguración de la recién restaurada fuente de la plaza de los Fueros. Original de finales del siglo XVI o principios del XVII, de ella se abastecieron durante más de 300 años sus vecinos, hasta que en 1957 las viviendas de la localidad empezaron a disponer de agua y la emblemática fuente fue retirada dejando huérfano este céntrico espacio. La inauguración se hizo coincidir además con las fiestas pequeñas, en honor a San Blas, y con la celebración anual de los Donantes de Sangre, un total de 175 para un municipio que no llega a los 700 habitantes. El único pero lo puso el tiempo, ya que durante los actos centrales, el agua, y hasta por momentos el granizo, hicieron acto de presencia.
De la antigua fuente se conservaban algunas piezas, como el surtidor central, pero la mayor parte, incluida la pila, ha habido que recrearla gracias a pruebas gráficas que se conservaban y al trabajo de la Cantería Jaurrieta, de Olite, y del proyecto elaborado por Sergio Sagasti. El resultado agradó a los cientos de vecinos que acudieron ala inauguración, especialmente a quienes la conocieron, como José Martínez, de 82 años. "Se parece bastante a la que había, y la verdad es que se echaba en falta. Todo el pueblo venía aquí antes a coger el agua", recordaba tras la bendición, que corrió a cargo del párroco, Enrique Arellano.
Además, varios colectivos quisieron participar en el evento, como el grupo de teatro Atarapana o la Banda Bizkarra, cuyos miembros representaron escenas tradicionales que años atrás se vivieron alrededor de esta fuente: mujeres rellenando el botijo de agua y lavando la ropa, niños jugando alrededor de la pila, etc. También emocionada estaba al alcaldesa, Mª José Sagasti, por lo que esta pequeña obra significa para Dicastillo. "Mucha gente estaba esperando que se restaurase, porque muchos la han conocido pero otros no, aunque hemos oído hablar de ellas siempre, y creo que es una fuente muy elegante. Y también da gusto contar con colectivos tan implicados que se han querido sumar a la inauguración", dijo. La obra ha tenido un coste de unos 39.000 euros, y ha sido financiada, además de con aportaciones o sorteos, con fondos municipales y del programa Eje 4 Leader de Desarrollo Rural, gestionados en la comarca por Teder.
Sergio Sagasti señaló que la restauración y recreación no había sido sencilla, aunque tenían algunas pistas. "Cuando se hizo la intervención arqueológica en el pavimento, salió la cimentación de la pila, y así supimos que tenía cuatro metros de diámetro, porque la pila, además de otros elementos, ha habido que hacerlos nuevos". Actualmente, el agua no es potable, sino que un circuito va bombeando el agua, unos m3 a la hora. "Pero está preparada para suministrarla de agua potable".
Por su parte, Mariano Sinués, que se encargó de la intervención arqueológica de la plaza, añadió que "no existe documentación exacta de cuándo se construyó la fuente, pero, por lo que pudimos deducir, es de finales del XVI o principios del XVII. Documentación escrita solo hay de mediados del siglo XIX, contando una anécdota de Zumalacárregui en 1833 alrededor de la fuente".
Justo antes de la inauguración, se celebró la misa en honor a los Donantes de Sangre, entregando tres medallas de oro a Luis Remírez, José Ignacio Martínez e Ignacio Remírez, y dos de plata, a Nacho Azcona y Javier Urbiola. El delegado de Adona en Dicastillo, Miguel Azcona, señaló que "en 2012 hemos hecho en Dicastillo 214 donaciones y hemos incorporado 11 personas nuevas, muchas jóvenes, hasta llegar a 175. Desde Adona siempre nos dicen que las cifras de donantes aquí son espectaculares, y tal es así que en vez de venir dos días al año el autobús, ahora viene seis, cuando en muchos sitios cada vez van menos. Es mérito de todos, porque aquí en todas las familias hay alguna persona que dona". Para acabar la fiesta, unos 80 donantes se reunieron a comer.