sartaguda. El Instituto Navarro de Tecnologías e Infraestructuras Agroalimentarias (Intia) celebró el pasado viernes una visita a la finca experimental de Sartaguda para mostrar los resultados y las novedades que ha arrojado un ensayo de más de cinco años sobre la cereza.

Hasta la localidad ribera se acercaron más de medio centenar de agricultores, productores profesionales de esta fruta, de Navarra y La Rioja. Los asistentes estudiaron, cataron y analizaron 25 nuevas variedades de cereza. Para Álvaro Benito, técnico de Fruticultura de Intia, "estos ensayos, aunque prolongados en el tiempo, sirven para aconsejar a los agricultores qué variedad deberían cultivar en sus explotaciones". En este sentido, Benito recomendó la plantación de cuatro tipos: Ferduce, Black Star, Kavic y Selah.

Benito puntualizaba que en esta jornada de puertas abiertas "se enseñan las principales novedades del sector, qué patrones hay que seguir, qué nuevas variedades existen, cuáles son las mejores y cómo se pueden acortar los plazos de producción para amortizar antes la inversión".

Precisamente, según este técnico especializado, hay una serie de pautas que hacen que una variedad sea más interesante que otra. "Por un lado está el periodo de maduración de la cereza. Se valoran mucho las variedades tempranas aunque después de San Fermín el precio suele repuntar porque disminuye la oferta", insistía Álvaro Benito.

Por otro lado es muy importante el calibre, que sea superior a 28 milímetros, y que sean dulces. También se valora muy positivamente que adquieran un color rojo oscuro sin perder su dureza.

Las personas que asistieron a esta jornada, a pesar de que este año han tenido una producción inferior a la esperada debido a las inclemencias meteorológicas, se mostraban satisfechas con los consejos recibidos.

En esta finca de unas 25 hectáreas se experimenta tanto en cultivos de invierno como es el caso de la lechuga tipo batavia, como en frutales. De hecho, se ensaya con el melocotón, la cereza y la ciruela.