sesma - El humedal del Salobre de Sesma ha sufrido un gran proceso de restauración hidrológica a lo largo de estos años con el objetivo de recuperar la flora y la fauna de esta zona ribera. De hecho, hace 30 años este paraje de gran calidad ambiental se desecó para que los agricultores pudieran cultivar en ella. Sin embargo, la tierra apenas fue productiva y este espacio terminó por abandonarse.
La recuperación de este terreno de unas 240 hectáreas de comunal de Sesma y Lodosa ha sido posible gracias a un convenio de colaboración entre los Ayuntamientos de estos municipios, el Gobierno de Navarra y la Obra Social la Caixa, que ha aportado 197.000 euros. Además, siete personas en riesgo de exclusión social han sido contratadas a través de la empresa Tasubinsa para llevar a cabo los trabajos de mejora.
Ayer por la mañana el consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, José Javier Esparza, se desplazó hasta este término para conocer las obras en personas puesto que, tal y como reconoció, “se trata de la recuperación de un hábitat histórico. Es una actuación fruto de un convenio de colaboración que tiene un doble componente: por un lado el factor social y por otro el medioambiental”. Esparza estuvo acompañado por José Antonio Lahoz, director del área de negocio de la Caixa en Tierra Estella, y los alcaldes de Lodosa y Sesma, Pablo Azcona y Pedro Mangado.
Karmele Areta, miembro del Servicio de Conservación de la Biodiversidad, y Aritz Zaldua, de Ganasa, se encargaron de explicar las actuaciones que se han llevado a cabo. Además de un estudio hidrogeológico, también se ha retirado toda la basura del lugar, se han taponado los drenajes para favorecer la entrada del agua y se han creado pequeños cordones de tierra para mantenerla.
Areta insistía en que este humedal, que anualmente se inunda y se deseca, aún deberá esperar unos cuantos años hasta que recupere la flora y la fauna que tuvo hace años pero que ya se empiezan a ver muchas aves y otras especies animales.
Por último, y con el objetivo de promover las visitas de los ciudadanos a este espacio se han colocado unas señales explicativas.
Recuperación. Lodosa y Sesma han recuperado un paraje de 240 hectáreas que fue modificado hace 30 años.
Trabajos. Se ha retirado la basura, taponado los drenajes y se ha favorecido la llegada y la conservación del agua.
Convenio. Han colaborado el Gobierno foral y la Obra Social la Caixa con 197.000 euros.
Empleo. Para llevar a cabo los trabajos se ha contratado a través de Tasubinsa a siete personas en riesgo de exclusión social.
Especies. Los visitantes podrán ver una gran cantidad de aves esteparias, caracoles, cigüeñas, libélulas y patos, entre otros.