Encierros, ¿riesgo o fatalidad?
En 2014, los dispositivos sanitarios realizaron más de 1.500 atenciones en los 1.493 festejos taurinos populares de NavarraEste año, la muerte ocurrida en Lerín ha abierto el debate sobre la seguridad
¿Son seguros los festejos taurinos, encierros y sueltas de vacas en Navarra? El tema no es baladí. A la última muerte en Lerín, el sábado pasado, de un recortador que fue alcanzado mortalmente por una vaca, le ha seguido esta semana la noticia de tres heridos más, de pronóstico grave, ocurridos en los encierros de Murchante, Lerín y Falces, el primero de los cuales resultó lesionado, además, fuera del vallado, es decir, era un mero espectador, lo que agrava aún más el asunto.
Este trágico balance ha puesto encima de la mesa un debate: ¿Se puede o no prevenir de forma más contundente que estos hechos luctuosos ocurran? ¿Se cumple la legalidad por parte de los organizadores de estos festejos? La mayoría de consultados por este periódico coinciden en apuntar a la fatalidad como la causa de estos últimos sucesos, más que a la existencia de carencias importantes en materia de prevención y seguridad. Indican que la normativa y los requisitos que pide el Gobierno de Navarra son muy exigentes: “Los estándares de seguridad que se aplican para estos espectáculos son muy importantes, y lo normal es que se cumplan”, explica Ángel Huarte, de la brigada de Juegos y Espectáculos de la Policía Foral.
De la misma opinión es Fermín Liroz, delegado de DYA Navarra en la zona de Puente la Reina, y que cada año participa en el dispositivo de una veintena de festejos taurinos: “En principio, hay mucha seguridad y cada vez más, pero son animales y, claro, son imprevisibles”. También Fermín Barón, veterano corredor de San Fermín, y de encierros como el de Tafalla o Sangüesa, considera que “la suelta de reses bravas por las calles llevan implícito el riesgo de sufrir una cogida leve o grave, incluso la muerte, como ha quedado reflejado de manifiesto desgraciadamente estos últimos días”. De hecho, en lo que va de verano, ha habido 9 muertos en el Estado en festejos taurinos.
Seguros o no, lo cierto es que los datos están ahí, y solo en 2014, los servicios sanitarios de Cruz Roja y DYA realizaron en torno a 1.500 atenciones por encierros, sueltas de vacas y otros actos taurinos populares en las fiestas patronales de la geografía navarra. La mayoría por erosiones, heridas superficiales y daños de poca importancia, pero de vez en cuando las cosas llegan a mayores. El pasado sábado un muerto en Lerín, un chaval recortador empitonado mortalmente por una vaca. La ambulancia se encontraba a un lado de la plaza y los servicios asistenciales a otro. El Ayuntamiento afirmó que el espectáculo cumplía la legalidad, pero ya ha cambiado la ubicación de los sanitarios. De hecho, Fermín Liroz, de la DYA, pone en evidencia que en este aspecto “se puede mejorar. Antes de empezar las fiestas, los ayuntamientos deberían hablar con los agentes que participan en el encierro, y no se hace. Hablando con los sanitarios, se podría mejorar la ubicación del dispositivo, porque en muchos casos, la ambulancia es un elemento decorativo y la ponen donde no moleste”. Así lo ha entendido este año Mendigorría: “Llevábamos años pidiendo una nueva ubicación más segura y efectiva, y este año nos han hecho caso”, añade Liroz, a quien le ha tocado participar en asistencias trágicas, como el vecino de Artajona que el año pasado falleció tras ser corneado y golpearse en la cabeza.
Según los datos del Ministerio de Cultura, en Navarra se celebraron, la mayoría durante las fiestas patronales de los pueblos, un total de 1.493 espectáculos taurinos, un 1,1% más que en 2013 (1.477), lo que coloca a la Comunidad Foral en el ranking, solo por detrás de la Comunidad Valenciana (7.866) y Castilla-León (1.862). Mucho dinero invertido y altas cifras de asistencias sanitarias a consecuencia de percances de distinta índole, pero los ayuntamientos cuentan con ello, porque sus vecinos les piden vacas, y cada vez más, según las estadísticas.
A tenor de las estadísticas que maneja Cruz Roja, que implanta dispositivos sanitarios en más de 30 localidades en fiestas, a lo largo de 2014 realizaron 449 servicios y 847 personas fueron atendidas, “la mayoría, por festejos taurinos”, explica José Aldaba, responsable de comunicación de la entidad. Cruz Roja moviliza a 500 voluntarios para estas tareas, pero otros tantos son los destinados por DYA Navarra, que solo en lo que se refiere a espectáculos taurinos está presente en 23 localidades navarras, realizando la cobertura sanitaria de unos 150 festejos. “Podríamos hablar de una media de 5 atenciones in situ por evento, la mayoría erosiones, golpes etc.”, explican desde la asociación, lo que da una cifra ingente: 750 atenciones al año. Cosa distinta es el número de trasladados por percances de mayor gravedad: “Realizamos 14 traslados a centros hospitalarios, sin contar San Fermín, y en lo que va de año hemos efectuado 8”, añadieron.
“La normativa es rigurosa” Ángel Huarte Itoiz es el responsable de la Brigada de Juegos y Espectáculos de la Policía Foral, que cada año y con un retén de 13 agentes, realiza en torno a 200 inspecciones en encierros, capeas y sueltas de vacas en Navarra. Él lo tiene claro: “La normativa es muy rigurosa”, dice y añade que se le dio un “empaque importante” a partir de 2012, con la aprobación de la Orden Foral 374/2012, de 29 de mayo, que determinó las características que debía tener el vallado de estos espectáculos, para evitar que un astado lo llevara por delante y saliese del recorrido. Para ello, tuvo que pasar una muerte, en el verano de 2012, la del vecino de Lodosa embestido en un portal.
Ya antes, en 2010, el departamento de Interior del Gobierno de Navarra intervino para controlar la instalación de barreras valencianas en los encierros (barrotes verticales de metal), que ya de por sí estaban prohibidos por el reglamento de espectáculos taurinos. Y otro empuje importante se dio en Pamplona en 2014 con la Ordenanza del Encierro, que tipificó las sanciones y los comportamientos inadecuados en la carrera. Este año en Pamplona, se han contabilizado 10 heridos por asta de toro y 42 traslados hospitalarios, y 9 personas fueron sancionadas. A juicio de Fermín Barón, el de Pamplona, como el de Tudela, Tafalla o Sangüesa “creo que cumplen a la perfección la normativa referente a encierros y la asistencia sanitaria es excelente”.
REGLAMENTO PARALIZADO La muerte de 2011 generó un gran debate en Navarra, tanto que se pusieron en marcha diversas mesas sectoriales para desarrollar un nuevo Reglamento Taurino, ya que el actual data de 1992, y hay aspectos que no regula. Hubo meses de debate, pero finalmente quedó paralizado. “Sería interesante retomar el tema -opina Ángel Huarte-, porque la fiesta evoluciona, hay más gente... Habría que darle una vuelta, sobre todo a los festejos populares”, dijo y añadió que en otras comunidades ya se han aprobado reglamentos taurinos nuevos, adaptados a los nuevos tiempos: “Si el Gobierno de Navarra lo ve oportuno, nosotros estaríamos encantados de trasladar nuestras inquietudes”, apuntó.
Adecuar la legislación podría ser un primer paso, en un momento el que, además, los colectivos antitaurinos están saliendo a la calle. A juicio de Fermín Barón, el debate está ahí: “Siempre que ocurre algún hecho que acaba con el fallecimiento de algún corredor o recortador salta a la palestra el debate de si es conveniente o no la suelta de reses bravas para el entretenimiento del público y más en los tiempos que corren con todo el tema animalista y antitaurino que está mas en auge que nunca”, concluye.
165 inspecciones (2015)
20 expedientes, 2 por menores
Festejos taurinos. En lo que va de 2015, la brigada de Juegos y Espectáculos de la Policía Foral, que dirige Ángel Huarte, ha realizado ya 165 controles de espectáculos taurinos sin muerte de reses, y ha realizado 20 informes al detectar diversas deficiencias: en 1 caso por dar comienzo con retraso; 1 por correr reses sin herrar; 8 por deficiencias en el vallado; 1 por utilizar una ganadería no autorizada; 4 por detectarse obstáculos en el recorrido; 2 por la participación de menores que prohibe la ley; y 3 por observaciones en el recorrido. “Por nuestra parte, no se ha suspendido ningún espectáculo este año, aunque sí retrasar”, precisó Huarte. Según los datos del pasado año 2014, se realizaron 256 controles, y hubo 53 informes, entre los que cabe destacar 10 casos por deficiencias en el vallado, y otros 2 en los que se usaron reses no autorizadas.
la ley dice que...
Festejo con vallado. La Orden Foral 374/2012 de
29 de mayo, recoge que el recorrido debe estar delimitado por un vallado, que evite la salida de las reses; éste debe tener salidas para posibles heridos y puertas para retirar reses.
Tipo de vallado. Sus elementos deben estar construidos con madera aserrada estructural; cada tramo del vallado tendrá que tener, al menos, tres tablones dispuestos horizontalmente y sujetos con postes verticales. La distancia entre postes tendrá que ser menor o igual a 3 metros.
Asistencia sanitaria. El Decreto Foral 249/ 1992, de 29 de junio, establece que los espectáculos taurinos celebrados fuera de las plazas de toros deberán estar asistidos “como mínimo” por un médico con experiencia en cirugía, un médico localizable, y un Ayudante Técnico Sanitario o DUE.
Prohibido niños. Según el artículo 91 en los espectáculos populares no se permitirá la participación de menores de 16 años. La empresa podrá elevar la edad a 18, como ocurre en Pamplona.
festejos en 2014
20
Corridas de toros. Según datos del Ministerio de Cultura, a lo largo de 2014, se celebraron en Navarra 20 corridas de toros, 7 corridas de rejoneo con toros, 12 novilladas con picadores, 3 festivales taurinos, 1 festejo mixto, y 5 novilladas sin picadores. El resto, hasta los 1.493 festejos taurinos que tuvieron lugar en la Comunidad Foral, eran sueltas de vacas, encierros, becerradas, y otras tipologías de espectáculo taurino menor.
entre 2011 y 2014
18%
Más de festejos populares. El número de festejos taurinos populares en Navarra viene aumentando en los últimos años. Entre 2011, en que hubo 1.220, y 2014, con 1.493, el incremento ha sido de un 18,28%. En 2012, hubo 1.366 y en 2013, 1.477. Otra cosa son los festejos llamados mayores (corridas, novilladas, etc).
En 2010, se contabilizaron 50, y el pasado año, 48.