tudela - Los nombres de 41 de las 49 calles del barrio de Lourdes, que responden a vecinos de la capital ribera que murieron durante la Guerra Civil en el frente luchando por el conocido como “bando nacional” en el ejército de Franco, podrían ser “nulos de pleno derecho” porque su denominación no fue aprobada nunca por el Pleno del Ayuntamiento de Tudela.

De todas las calles del Barrio de Lourdes que fueron rotuladas entre la década de los 50 y los 60 con los nombres de vecinos, sólo ocho recibieron el respaldo de los concejales, tal y como se recoge en las actas municipales en un acuerdo del 17 de febrero de 1954.

En aquella fecha se presentó un escrito del gobernador civil, presidente del Patronato Francisco Franco que participó en la construcción del barrio, en la que se proponía “que a las nuevas calles de la zona de viviendas protegidas se le den los nombres de los primeros combatientes caídos en nuestra Cruzada. La corporación ve con el mayor agrado la sugerencia que hace el gobernador civil y acuerda aprobarla por unanimidad”, aprobación que se hizo bajo la alcaldía de Julio Garbayo.

Estas calles fueron Santiago Fernández Portolés, Felipe Gaytán de Ayala, Félix Marsal Moracho, Julián Arcos Escribano, Lucio Bordonaba Bordonaba, Luis Moracho Ciria, Alfredo Casajús Martín y Hermanos Pérez Nievas.

Legales o no, todos los nombres de calles de esta zona que responden a tudelanos muertos en la guerra se ven afectados por la Ley de Memoria Histórica, tal y como indicó el TAN en una sentencia respecto a unas calles del barrio de la Chantrea de Pamplona.

sin pasar por pleno Tal y como ha explicado en varias ocasiones el historiador Fernando Mikelarena (y que analiza detalladamente en su blog) para las demás calles no consta en ningún acta acuerdo de pleno de refrendo. “Debe entenderse que al no haber acta, no hubo tampoco acuerdo alguno; por lo tanto, los nombres de la inmensa mayoría de las calles del Barrio de Lourdes no tendrían ningún fundamento legal”, señala. Incluso añade que a efectos legales todavía estarían sin denominar “siendo su nombre producto de la costumbre carente de cualquier marchamo legal”. Por lo tanto, se desprende que la denominación del resto de calles fueron dictadas por el Gobierno Civil y asumidas por el Consistorio.

Para esta alegalidad de las denominaciones se apoya en la ley del 17 de julio de 1958 sobre Procedimiento Administrativo que hace hincapié en la potestad única del Consistorio para poner nombre a las calles. Además, Mikelarena cita el decreto de 17 de mayo de 1952 que reiteraba en su artículo 225 que “no se considerará existente el acuerdo que no conste explícita y terminantemente en el acta que corresponda a su adopción. Podrá ser subsanada la omisión de cualquier acuerdo si, en virtud de escrito documentado del secretario, así lo aprueba la Corporación antes de que se cierre el acta de la sesión siguiente a la que hubiere sido adoptado”.

Tal y como indica Mikelarena, y ha constatado en el Archivo Municipal de Tudela, no consta en ningún acta de plenos del Ayuntamiento de Tudela aprobación alguna para las 41 calles que quedarían en situación alegal. El historiador Mikelarena, en su blog, indica que “tras haber consultado los libros de actas de sesiones de pleno del Ayuntamiento de Tudela del periodo 1954-1970, hemos encontrado solamente un acuerdo de designación a dichas calles del Barrio de Lourdes referido únicamente a las ocho primeras. Respecto de las demás 41 calles del barrio, no hemos encontrado ningún acuerdo de designación de sus nombres en los libros de actas de las sesiones. Desde el archivo municipal sus responsables nos comunicaron que tampoco habían localizado acuerdo alguno relativo a los nombres de esas 41 calles”.

sentencia del tan Hay que recordar que una resolución del TAN de febrero de 2008, sobre la denominación de unas calles del barrio de la Chantrea, indicaba que “otorgar nombres vinculadas con una causa ideológica ha sido una herramienta de propaganda política” por lo que indicaba que “dar su nombre a una calle tiene un importante valor simbólico”, razón por la que sentenciaba que “los nombres de calles pueden constituir uno de los símbolos cuya retirada exige la Ley Foral de Símbolos de Navarra”. En este sentido, el TAN hace hincapié en que “el argumento de que no eran personas significadas del denominado bando nacional” no hacía sino incidir en su carácter de “símbolo y mártir por la causa”.

iniciativa El pasado mes de diciembre, la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra entregó un informe al Ayuntamiento de Tudela en el que solicitaba que se elaborara un plan para la retirada “integral y definitiva” de los símbolos franquistas así como de las “menciones y homenajes que ensalcen la dictadura y represión infringida contra las personas que defendieron los valores republicanos, especialmente en lo relativo a las denominaciones de las calles”. El alcalde, Eneko Larrarte, se mostró entonces favorable, aunque apuntó que había que hacerlo “de forma didáctica y no conflictiva, pero hay que hacerlo porque es de justicia”.

Al margen de las calles, en el Barrio de Lourdes existen aún placas con simbología franquista que se ven afectadas también por la Ley de Símbolos.

41 calles. Alejandro Lasala Arriazu, Ángel Pérez Francés, Benito Caparroso Paños, Bernardino Lacarra Calavia, Bernardo Escós Catalán, Bienvenido Sánchez Alfaro, Bonifacio Olleta Martínez, Cándido Santos Jaime, Carmelo Baquero Jacoste, Cecilio Benito García, Cenón Amigot Munilla, Esteban Álava Garasa, Felipe Pérez Jiménez, Félix Bailó Baquin, Fermín Ochoa García, Fco. Álava Serrano, Fco. Sarasa Morán, Fco. Úcar Goldesmit, Fco. Javier Añón Baigorri, Hermanos Segura Golmayo, Javier Garijo Satrústegui, Jesús Clemos Burgaleta, Jesús Gorrindo Abadía, José Álava Matute, Juan Salvatierra Puertas, Luis Lacarra Munilla, Manuel Jiménez Romé, Manuel Moneo Fernández, Manuel Robles Pintado, Pedro Inaga Moreno, Pedro Jacoste Garde, Pedro Labarga Gascón, Perfecto Malo Munilla, Rafael Delgado Garcés, Ramón Dachari Jusué, Ricardo Enériz Ochoa, Santos Coloma Avizcuren, Santos Nevot Moracho, Serafín Azcona Gamen, Tomás Osta Francés, Victoriano Bordonaba Gil.