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Los funerales civiles no terminan de cuajar

solo se ha celebrado una despedida en la casa de cultura desde que entró en vigor la ordenanza hace cuatro años

La posibilidad de celebrar funerales civiles en Estella-Lizarra no está calando entre la ciudadanía, y es que a pesar de que en el año 2012 se aprobó una ordenanza que permitía realizar este tipo de despedidas, lo cierto es que este servicio solo se ha utilizado una vez en los cuatro años que lleva de vigencia.

En el Ayuntamiento desconocen las causas por las que la ciudadanía no utiliza esta posibilidad, aunque el alcalde, Koldo Leoz, indica que tal vez se deba a desconocimiento. “El poco uso puede ser porque no se conoce. Igual deberíamos darlo a conocer y ponernos en contacto también con los tanatorios, que muchas veces es donde las familias piden información”, señala el primer edil.

Cuando se dio luz verde en 2012 a la posibilidad de realizar despedidas de este tipo, se elaboró una ordenanza que las regula, en la que se detalla cómo se deber realizar el procedimiento, los derechos y deberes de los usuarios del servicio, así como las tasas. Por ejemplo, la solicitud se debe tramitar en el Ayuntamiento y dirigirse a la Alcaldía. Desde el Consistorio se comprometen también a gestionarlo con celeridad. “La tramitación se regirá por el principio de inmediatez que requieren las circunstancias”, indica la ordenanza.

El lugar preferente en el que se realizan estos actos de despedida es la casa de cultura Fray Diego de Estella, aunque con carácter extraordinario se pueden utilizar otros locales “que cumplan los requisitos necesarios de aforo, necesidad y seguridad”. El Consistorio tiene también concretado el horario de estos actos, que se pueden celebrar de lunes a domingo de 11.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 20.00 horas. La normativa contempla que la duración de la ceremonia sea de una hora como máximo.

sin cuerpo presente Uno de los aspectos más relevantes que recoge la norma es que en estas despedidas no puede estar presente el cuerpo del fallecido, aunque sí sus cenizas si es el caso. El coste que los promotores de la despedida deben abonar es de 55,58 euros si es dentro del horario de la casa de cultura y si por cualquier circunstancia hay que incorporar personal externo, los usuarios deben asumir su coste más la tasa mencionada. Además, tienen que aportar una fianza de 50 euros por cada despedida.

Por otra parte, cuando la familia o los amigos de la persona fallecida lo deseen podrán ornamentar la sala de forma especial previa comunicación con el responsable municipal que esté al cargo de la despedida.