a golpe de tambor recibieron ayer los lakuntzarras el día de su patrón, San Saastin, nombre con el que se conoce en esta localidad de Sakana a San Sebastián. Así viene repitiéndose desde 1990, cuando un grupo de vecinos pensó que sería una buena forma de comenzar este día, al igual que lo hacen en otras localidades de Gipuzkoa como San Sebastián o Azpeitia. Fue a medianoche, cuando un grupo de unos 60 tamborileros ataviados de cocineros se dirigieron de la sociedad Lakuntzako Pertza a la plaza para ofrecer un sonoro concierto al resguardo de la lluvia en la carpa, que se quedó pequeña.
Comenzó con la Marcha de San Sebastián, acompañados los tambores de las voces del Coro de Lakuntza. Después fue Tatiago, Idiyarena y Diana, las conocidas obras de Sarriegui, junto con la txaranga Ozarki reforzada con miembros de la banda Haize Berriak. Continuó con Diana número uno de La Pamplonesa, Biribilketa de Otsagabia, Zortziko de Lantz y Artillero dale fuego, un repertorio que ha ido creciendo estos últimos años y que los tamborileros ensayaron durante toda la semana con Ricardo Areta, uno de los artífices de esta cita.
Los tambores callaron para la entrega del gorro de honor. Y es que la tamborrada también tiene sentido de homenaje y de reconocimiento a aquellas personas que han trabajado de diferentes maneras por y para Lakuntza. Ayer fue para Jokin Alegria, más conocido como Kale, un pintor aventajado alumno de Antonio López, que ha llevado muy alto el nombre de Lakuntza, según destacó Joxe Flores, otra de las personas claves para que siga viva esta fiesta.
Tras agradecer a los presentes tal honor, Kale señaló que le hacía ilusión que reconocieran su trabajo, aunque por otro lado se preguntaba si merecía tal galardón. “Si así fuera, no menos lo merecerían músicos, bandas de rock, grupos de teatro, de danza, escritores e ilustradores o pintores como yo que hay en este pueblo. Así que es de todos”, señaló. Asimismo, animó a las nuevas generaciones a perseguir sus sueños. “Con trabajo e ilusión se llegan a hacer pequeñas o grandes cosas. No hace falta ser alguien importante o de primer nivel, si no hacer lo que te gusta”, abundó. Maider Betelu, presidenta de la sociedad Lakuntzako Pertza, fue la encargada de ponerle el gorro entre grandes redobles y aplausos.
ROMERÍA Al mediodía fue la romería a la ermita de San Saastin, situada a unos tres kilómetros en las faldas de Aralar. A pesar de que estaba anunciada lluvia, no fue así y fueron muchas las personas que acudieron a la misa y sobre todo al almuerzo que ofreció la sociedad Lakuntzako Pertza. Entre otros alimentos, se repartieron 30 kilogramos de txistorra y 50 litros de chocolate, además de queso y piperopiles bendecidos. Al respecto, la víspera fue el concurso de estos dulces típicos de Lakuntza. Se presentaron once. Ganó Jesús Mozo en una final muy disputada con Cristina Razkin.
De vuelta en el pueblo, estas celebraciones de invierno continuaron ayer por la tarde, con partidos de pelota, tamborrada txiki y bailables. Día grande, se bailó la Alkate dantza. Los festejos finalizan hoy con hinchables en el frontón, gigantes y cabezudos, auzate y desafío de hachas por la mañana. Por la tarde también habrá hinchables así como un espectáculo de música danzas, auzate y zenzensuzko.