PAMPLONA. El Gobierno de Navarra ha anunciado este martes que va a adoptar una serie de medidas con objeto de mejorar la seguridad en la N-121-A, entre las que descarta la restricción del tráfico de camiones. Se propone así limitar a un solo sentido los adelantamientos en los tramos de tres carriles, solicitar la colocación de radares fijos a la DGT, potenciar la presencia policial con patrullaje proactivo, realizar campañas de concienciación y seguridad vial, poner en marcha un proyecto piloto para chequear la vía a través de cámaras e inteligencia artificial, reponer la señalización horizontal y el firme y mejorar la iluminación en los túneles.

Todas estas medidas, ha señalado el Gobierno foral, tienen como objeto "reducir la siniestralidad en esta vía, a la espera de la futura conversión de la carretera en una vía 2+1".

El vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, y el consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, han avanzado este martes estas medidas a los alcaldes de los ayuntamientos de Baztan, Bera, Ezkabarte, Lesaka, Santesteban e Igantzi en una reunión en la que también han participado los directores generales de Interior, Amparo López, de Obras Públicas e Infraestructuras, Pedro López y de Transportes, Berta Miranda.

Asimismo, les han trasladado su "total disposición" a recibir y analizar otras propuestas de mejora para la N-121-A y ambas partes se han comprometido a mantener abiertos los cauces de comunicación y colaboración.

LIMITACIÓN DE ADELANTAMIENTOS EN TRAMOS DE TRES CARRILES

El Gobierno de Navarra va a limitar a un solo sentido los adelantamientos en los tramos de tres carriles de la N-121-A con objeto de "reducir la siniestralidad". De este modo, en estos tramos de tres carriles tan sólo se permitirá el adelantamiento a los vehículos que circulen en el mismo sentido al de la vía lenta.

Esta limitación de los adelantamientos viene motivada al constatarse, en los informes de accidentalidad de la N-121-A elaborados por el Área de Tráfico y Seguridad Vial de Policía Foral, que se continuaban generando situaciones de peligro entre vehículos que coinciden adelantando en el carril central y en sentidos contrarios. En muchas ocasiones estas situaciones de peligro acababan en salidas de vía y colisiones frontolaterales, frontales y laterales.

Esta medida, que "permitirá dar un funcionamiento más homogéneo a la vía", impedirá adelantar, en sentido Pamplona, en los tramos comprendidos entre los puntos kilométricos 17+900 a 18+450, 20+720 a 21+240 y 26+120 a 27+130, y en sentido Behobia, en los tramos comprendidos entre los puntos kilométricos 37+000 a 37+590, 48+240 a 48+730 y 66+160 a 66+540, ha precisado el Ejecutivo.

Además, el Gobierno de Navarra solicitará a la Dirección General de Tráfico la colocación de radares fijos en los tramos 1 y 6 de esta vía, que son los que registran una mayor accidentalidad.

De igual modo está previsto seguir apostando por potenciar la presencia policial desde un patrullaje proactivo, basado en dispositivos estáticos y dinámicos de vigilancia. Policía Foral ha realizado en 2019 un total de 1.452 controles frente a los 1.193 del ejercicio anterior en la N-121-A.

Por otro lado, y "aprovechando los avances que proporciona la tecnología", se está estudiando la puesta en marcha de un proyecto piloto para, a través de cámaras e inteligencia artificial, chequear la carretera y poder observar en tiempo real y a posteriori la actuación y conductas de los vehículos. "Cruzar factores como la velocidad, trayectoria, climatología y otros datos ayudarán a obtener mejor información para adoptar futuras medidas que posibiliten reducir la accidentalidad", ha añadido.

Además de la presencia policial, el Gobierno ha indicado que se debe trabajar la seguridad vial de manera transversal, incorporando a la sociedad civil. En este sentido se impulsarán campañas de concienciación y seguridad vial en la zona y se animará a su implementación a los distintos agentes implicados.

OTRAS ACTUACIONES DE MEJORA EN MATERIA DE CONSERVACIÓN

Con objeto de mejorar la visibilidad de la señalización, se prevé, en las próximas semanas, proceder a la reposición completa de la señalización horizontal en el eje y en los laterales a lo largo de los 62,87 kilómetros de longitud de la N-121-A.

Ha indicado el Gobierno que la anchura de pintado será de 0,15 metros (frente a los 0,10 metros actuales). En este sentido, "Navarra se adelanta a las futuras Directrices del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana".

Asimismo, una vez finalice la campaña de vialidad invernal desde Obras Públicas tienen programado el fresado y reposición de firme en varios tramos de la N-121-A entre los puntos kilométricos 25+990 y 68+440. Está actuación "permitirá mejorar el coeficiente de rozamiento y la regularidad", ha añadido.

Mejorar e incrementar la iluminación en los túneles de la Red de Carreteras de Navarra es otra de las líneas de actuación que viene desarrollando Cohesión Territorial. En concreto, se viene trabajando en la renovación de las luminarias actuales de VSAP (Vapor de Sodio) por luminarias LED. Este último tipo de bombillas conllevan una mayor iluminación y durabilidad así como un menor consumo energético.

De manera progresiva está prevista la sustitución de luminarias en los túneles de Belate y Almandoz. Desde finales de 2018 se han cambiado un total de 358 luminarias en siete túneles de la N-121-A (Oieregi, Sunbilla, Larrakaitz, Bera, Arrigaztelu, Amixelaieta y Basataundi) y en los dos túneles de Ezkaba de la carretera PA-30.

SE DESCARTA DE MOMENTO LA RESTRICCIÓN DE CAMIONES

El Gobierno ha señalado que informes de Policía Foral revelan que en los cuatro últimos años, de los 12 accidentes mortales con 17 personas fallecidas, solamente en un caso se achaca la responsabilidad a un camión. En este caso además, fue una salida de vía del propio camión que chocó contra un árbol y se incendió, es decir, sin implicación de otros vehículos, ha añadido.

En la mayoría de los accidentes mortales en ese periodo, ha continuado, la causa fue un choque (un vehículo en movimiento y otro parado) o una colisión frontal (dos vehículos en movimiento), generalmente producido a consecuencia de adelantamientos indebidos, salida de vía o una invasión del carril contrario.

El Gobierno ha manifestado que cualquier actividad restrictiva de la Administración deber estar debidamente motivada ya que, de lo contrario, "se estaría incurriendo en una arbitrariedad". Por ello, el Gobierno de Navarra descarta, de momento, la restricción de la circulación de camiones en la N-121-A.

El Ejecutivo ha señalado que tiene en cuenta, además, la reciente jurisprudencia. Ha indicado que el Tribunal Supremo ante una restricción de la circulación a camiones en el tramo riojano de la N-232 señala en una sentencia que "la eventual notoriedad de la contaminación acústica, de la congestión del tráfico y de la siniestralidad en carreteras convencionales no es suficiente por si sola" para acordar una medida así.

Según añade, la "congestión del tráfico, es decir entorpecimiento del tráfico por acumulación de vehículos, por muy desagradable que sea para los conductores no es igual, al concepto alta siniestralidad en la carretera que hace mención a los accidentes de tráfico y subsiguientes resultados letales, lesivos para las personas".

Del mismo modo señala el Tribunal, que si la restricción obliga a las empresas de transporte a acudir necesariamente a la autopista de peaje, aunque sea con bonificaciones, necesitaría una acreditación. Además en la sentencia, el alto Tribunal apunta que la limitación del tránsito a camiones implica que "se impone un gravamen" y que "tal exigencia debe estar justificada en estudios".