- El eco de una bocina, un mismo sonido, un ruido que se repite a diario y que saca a los vecinos de sus casas. En las calles de Mélida hay un vehículo que circula anunciando su presencia en diferentes puntos del pueblo, una furgoneta conducida por el panadero, que reparte a domicilio su género "los 365 días del año" y que en el último mes ha tenido que modificar parte de su rutina habitual para adaptarse a los tiempos que corren.

José Francisco Pina regenta el negocio familiar, una panadería que abrió sus puertas en este pueblo navarro hace 120 años, de la mano de sus bisabuelos y a la que ahora le ha tocado sortear el devenir de una pandemia mundial. Una situación que Pina acepta con optimismo estoico y a la que se ha adaptado con rapidez durante las semanas de este último mes. "Hay que salir a trabajar y atender también en la panadería, es una circunstancia que ha tocado así y lo llevo con tranquilidad y mente positiva", enfatiza.

"El 90% de las ventas se hacen con la furgoneta en la calle", revela Pina, quien amontona en su furgoneta el pan y las pastas que él mismo elabora para luego repartirlas por los domicilios del pueblo. Una dinámica de venta habitual en Mélida pero que ha cambiado ligeramente con la llegada de la pandemia. Además de las medidas obligadas de higiene y el distanciamiento obligado entre vendedor y comprador, José Francisco protege su cara con una pantalla de protección elaborada gracias a la impresión en 3D para protegerse y proteger a los vecinos, además de los ya habituales guantes.

Todo el trabajo se realiza sin que haya ningún contacto físico. Él, que no recuerda nada parecido, decidió que durante el tiempo que se alargue esta situación excepcional no iba a cobrar a los vecinos en el momento de la venta para evitar al máximo el contacto. "Hago una cuenta para cada persona y a final de mes me pagan todo lo que hayan comprado, así no tenemos que andar cogiendo el dinero y pasarlo de unos a otros cada día", explica.

La bocina de la furgoneta anuncia la llegada del panadero y en ese momento, que ya se ha impuesto como algo tradicional en el pueblo, los melideses que quieren algo más que el propio pan se acercan al vehículo. "No funciona por encargo, yo me acerco con la furgoneta de reparto, llevo más o menos siempre el mismo pan -la gente compra casi siempre lo mismo- y si quieren algo más también llevo las pastas, los huevos y el resto de productos", detalla Pina, quien continúa su ronda hasta Rada, pueblo colindante y que no tiene panadería propia, aunque allí deja el pan en una tienda y no se encarga de entregarlo a los vecinos.

La venta en tienda es mínima pero José Francisco también tiene abierto durante estas semanas su local en Mélida, un comercio en el que ahora se anuncia la restricción de un máximo de un cliente en su interior.

Durante los días difíciles parece que la gula aprieta. Los vecinos de Mélida compran lo imprescindible, lo básico, el pan, pero estiran su bolsa de la compra hasta alcanzar algún capricho. "Estoy vendiendo más pan y más pastas que de normal", confiesa Pina, que enfatiza en el aumento de ventas en los productos más dulces.

Los productos que sí se han quedado atrás en las compras de estos últimos días han sido las tartas y las elaboraciones más producidas. "Hay cosas que se están vendiendo algo menos porque de normal se cogían tan solo para las grandes celebraciones", afirma Pina.

La Panadería Pina mantiene el sabor tradicional y el trabajo artesanal. José Francisco entiende el oficio del panadero como lo hacían las tres generaciones que le precedieron "haciendo pan casero y distinto al que se ofrece en otros lugares".

"No puedes hacer lo mismo que hacen a gran escala, hay que elaborar un producto diferente", precisa Pina, el panadero del pueblo, el que se levanta todos los días de la semana -menos los domingos- a las dos de la madrugada para elaborar, amasar y hornear un producto que ahora, más que nunca, se recibe con alegría en las calles de Mélida.

"Cada vecino paga su factura a final de mes, así evitamos el intercambio de dinero constante para prevenir"

Panadero