a pandemia del COVID-19 está suponiendo, para la ciudadanía de Pamplona y de todos los lugares afectados del mundo, uno de los momentos más duros que se han vivido en nuestra época. No puedo comenzar este escrito sin enviar nuestro cariño a todas esas familias que han sufrido la pérdida de seres queridos en estos días, sin tan siquiera poder acompañarles en sus últimos momentos. Ello, sin duda, supone un sufrimiento añadido, para cuya superación trasladamos todo nuestra solidaridad y apoyo. Igualmente, un afectuoso recuerdo y todo nuestro ánimo para cuantas personas están sufriendo la enfermedad, cuya recuperación deseamos que sea lo antes posible.

Como tampoco queremos dejar de rendir un sincero homenaje a los equipos sanitarios, que incluso con grandes dificultades, están sabiendo dar todo lo mejor de sí, para ayudar a cuantos enfermos lo necesitan, incluso poniendo en riesgo su propia salud. Al mismo tiempo que agradecer su esfuerzo a tantas personas que están trabajando incansablemente en todos los servicios básicos y que nos permiten hacer nuestro día a día más llevadero, y a las fuerzas y cuerpos de seguridad que velan en nuestras calles por nuestra protección. Todos ellos son ejemplo de una sociedad responsable que ha demostrado que no se rinde.

En Pamplona, sabemos que la única solución para detener la pandemia es unirnos, apoyarnos e insistir en que toda la población que se quede en casa, para parar la cadena de transmisión del virus.

Desde el comienzo, la ciudad se detuvo, cerrando centros sociales, espacios de ocio y lugares cuya labor no fuera de primera necesidad. Defendimos que la mayor parte posible de los trabajadores municipales se pudieran acoger al teletrabajo, y así evitar el riesgo de contagio, y nos pusimos manos a la obra para concretar con el equipo de Gobierno unas políticas encaminadas a dos objetivos: la protección de nuestra sociedad y de los profesionales que estos días tienen que trabajar en labores esenciales, y una salida social que piense en los que más van a sufrir esta crisis cuando finalmente podamos parar la curva.

Solicitamos que se nos incluyera en el gabinete de crisis a los grupos de la oposición, que en realidad somos tres personas más, para colaborar más activamente todavía. Sin embargo, puesto que el Alcalde no lo consideró oportuno, desde la Junta de Portavoces trabajamos activamente para aportar nuestro punto de vista, en aras a salir de esta situación juntos y de la mejor manera posible.

Ahora, también lo haremos cada semana en las recién reanudadas comisiones, presentando propuestas de cara a la reconstrucción social y económica de la ciudad, y la atención a los que peor lo están pasando. Es imprescindible que pensemos en las personas mayores, las más vulnerables ante el virus; en las víctimas de violencia de género, cuya situación se ha visto agravada por la permanencia domiciliaria; en las emergencias habitacionales€ Para todos ellos, nuestro apoyo a las políticas que se puedan llevar a cabo desde el Ayuntamiento es infinito.

Asimismo, defenderemos medidas que alivien la presión de todos esos trabajadores que se han visto afectados por un ERTE, de los autónomos que han tenido que cerrar sus negocios y de los comerciantes perjudicados por la inevitable suspensión de Sanfermines.

No podemos olvidar el ejemplo que da la inmensa mayoría de la ciudadanía pamplonesa cumpliendo las normas de prevención para protegerse ellos y proteger a los demás, así como su solidaridad y generosidad en la ayuda a quien lo necesita, a través de las múltiples iniciativas que han surgido en estos días.

A todo esto hay que sumar las lecciones que nos está dejando la crisis, con una que destaca por encima de todas: la importancia de una sanidad pública fuerte y preparada, que pueda hacer frente a los retos presentes y futuros que debamos acometer, con las disfunciones que debamos corregir en adelante, pero manteniéndola y potenciándola más. Porque hablar de lo público es hablar de igualdad de oportunidades para todos y todas. Esta es nuestra posesión más importante y el legado que debemos dejar a las próximas generaciones.

Con todo esto, con el trabajo, la responsabilidad y los servicios públicos, no tengo ninguna duda de que podremos vencer al virus, de que Pamplona volverá a llenar sus calles, que los comercios e industrias podrán volver a trabajar con normalidad y que saldremos reforzados como sociedad de este duro bache, que vamos a superar.La autora es Portavoz del Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Pamplona