Valdejunquera vuelve a la carga 1.100 años después

taviados con escudo y mascarilla, lanza y gel desinfectante, centenares de personas se despidieron de estos tiempos tan atípicos para dar, por unas horas, un salto a otros muy distintos, pero igual de convulsos. De pandemia, a batalla contra las tropas musulmanas de Abderramán III. Durante los dos últimos fines de semana, las localidades de Muez y Salinas de Oro se han convertido en escenario de los recorridos teatralizados organizados por la Asociación Tierras de Iranzu en conmemoración a los 1.100 años de la batalla de Valdejunquera.

Los días 1 y 2 de agosto, 200 personas se acercaron al Valle de Guesalaz para adentrarse en la contienda que tuvo lugar en el año 920 en ese mismo espacio y que enfrentó al rey navarro Sancho Garcés y a los ejércitos del emir de Córdoba. Aunque la gerente de Tierras de Iranzu, Charo Apesteguía, lamentó no haber podido acoger a todos los interesados en las recreaciones -siendo 300 las personas que tuvieron que quedar fuera de las visitas por la limitación de aforo a causa de los protocolos higiénico-sanitarios-, sí destacó el disfrute vivido por los participantes que sí formaron parte de la experiencia. Estos pudieron recorrer, en un trayecto de 6 kilómetros, "los bellísimos paisajes de los cañones de Ubagua, Obantzia y Erragoz, el Embalse de Alloz y todos los pueblos del Valle de Guesalaz".

Las dos primeras visitas fueron guiadas por el historiador Iñaki Sagredo, quien fue desgranando todos los pormenores de la batalla, la situación de las tropas y los resultados del encuentro armado, además de adentrarse en los aspectos etnográficos de la época, la forma de atacar de los diferentes ejércitos cristianos y musulmanes y en los detalles de los principales protagonistas de las contiendas, Abderramán III, Sancho Garcés I y Ordoño II de León. La parte teatral corrió a cargo de Imperial Service, quienes, con "todo el rigor histórico", se metieron en la piel del médico medieval, el ejército a caballo y los monarcas en disputa. Durante la sesión, interactuaron con los visitantes, quienes no solo fueron un soldado más de las tropas, sino que se adiestraron en el uso de las armas de la época. Como colofón final, el polideportivo del Valle de Guesalaz albergó una degustación de pintxos medievales y vinos de Tierras de Iranzu.

Ayer el recorrido teatralizado comenzó en Salinas de Oro, donde se encuentran los restos de El Castillo de Oro, un encalve de gran importancia en la defensa de Navarra. Así, la recreación giró, en esta ocasión, en torno a la Batalla de Valdejunquera y el papel que esta fortificación estratégica tuvo en ella, algo que Apesteguía calificó como "valor añadido". También hubo cata de vinos ecológicos de Bodegas Lezáun y pintxo medieval, así como con la presentación de la primera cosecha de sal. Por la tarde, de nuevo en el polideportivo del Valle de Guesalaz, tuvo lugar un concierto de música antigua a cargo del grupo murciano Esemble la Danserye, artesanos e investigadores.

Este particular homenaje a la historia y al ocio concluye hoy a las 12.00 horas, en la Iglesia de San Miguel de Salinas de Oro, con una "interesante" charla del historiador Iñaki Sagredo sobre el Castillo. Los organizadores se mostraron "ilusionados y satisfechos".