un tramo de la actual avenida de Barañáin formaba parte de la denominada Vuelta de la Longaniza. El nombre había surgido a fines del siglo XIX, de forma no oficial, cuando comenzó a denominarse así a una suerte de paseo que partía del punto donde se obtuvo la foto, para marchar por el barrio de San Juan, Pío XII e Irunlarrea, para llegar al Complejo Hospitalario y regresar al punto de partida tras tocar la Vuelta del Castillo. El paseo dibujaba un trazado en forma de triángulo de ángulos redondeados, y algún pamplonés con las necesidades alimentarias muy precariamente cubiertas quiso ver ahí... una longaniza. Y de tan dudoso parecido surgió el castizo nombre.

En aquella época Osasuna jugaba sus partidos en el viejo estadio de San Juan, cuya puerta se encontraba justamente a espaldas del lugar donde se colocó el fotógrafo, en el cruce de la carretera de la Longaniza con Monasterio de Urdax.

el lugar ha sufrido radicales transformaciones, y tan solo el trazado de las calles permite identificar ambas imágenes. Desapareció hace ya mucho tiempo el edificio de estilo neovasco que ocupaba el lugar en 1967, así como las cocheras que lo flanqueaban, y en su lugar vemos el moderno colegio San Cernin. Y tampoco queda rastro del campo de San Juan, que fue clausurado aquel mismo año, derribándose luego para facilitar la apertura de la calle Monasterio de Urdax. El feudo osasunista fue entonces trasladado al nuevo estadio de El Sadar, que hoy se encuentra en proceso de remodelación.

La propia carretera de la Longaniza fue borrada del mapa, y hoy en día solo los más veteranos recordarán su existencia. En la actualidad su itinerario está ocupado por otras calles, como la avenida de Barañáin o la calle del Monasterio de Vadoluengo, cuando no por bloques de viviendas o zonas ajardinadas.