Los y las irurtzundarras despidieron ayer cinco intensos días de celebraciones. Especialmente sentido fue el adiós a Gartzia Ximenez, Amaia, Teodosio de Goñi y Petronila, los gigantes de la Comparsa de Irurtzun, sin olvidar a sus inseperables kilikis. Lo hicieron a lo grande, acompañados de las comparsas de Lakuntza, Lekunberri y Burlada. Y es que cumplen 40 años aportando ilusión y magia en las celebraciones de la localidad. Cuatro décadas después, estas figuras forman parte de la infancia de generaciones de irurtzundarras, es más, las fiestas no podrían entenderse sin ellas. Con altibajos, en la actualidad la comparsa goza de buena salud, en torno a 15 porteadores, en su mayoría jóvenes.