Entrado diciembre, un año más, la Asociación de Belenistas de Sakana anuncia la Navidad desde el antiguo consultorio médico de esta localidad. Y lo hace a través de 12 dioramas de 5 metros cuadrados que representan diferentes escenas del nacimiento y vida de Jesús ordenadas de modo cronológico. La exposición comienza con la anunciación y continúa con empadronamiento, buscando posada, nacimiento, anunciación de pastores, adoración de pastores, cabalgata de Reyes, adoración de Reyes, huida a Egipto, descanso en la huida, infancia de Jesús y taller. Cuatro son nuevos y el resto se han reutilizado, con algunos cambios. Son postales navideñas llenas de detalles que invitan a una mirada atenta y sin prisas.
Los artistas son Javier Beunza, Katy Mayor, Felipe Orabengoa, Luis Borrega, Patxi Agirre, Jesús Mari Garmendia, Paco Sanz y Emeterio Galán, quienes con mano experta y sin mirar el reloj, han dado forma a porexpan de diferentes densidades para reproducir paisajes idílicos, con motivos cogidos de aquí y allá, como una casa de Ziordia que se puede ver en el Empadronamiento. Además, se permiten licencias, como el traslado de la Anunciación a un pueblo costero.
En los belenes se percibe que hay mucho trabajo detrás. “La mayoría llevan una media de 800 horas”, apunta Orabengoa, presidente de esta asociación creada en el año 2000. Desde entonces no han fallado a su cita salvo en 2020 con motivo de la pandemia, lo que obligó a retrasar el vigésimo aniversario hasta que se pudieron dejar atrás las restricciones.
A tenor de los datos de otros años, se espera que a lo largo de estos días visiten la exposición más de 3.000 personas, tanto de Sakana y zonas limítrofes como de lugares más lejanos “Este puente han venido de Valencia y Oviedo”, observa Orabengoa. Y es que el trabajo de la Asociación de Belenistas de Sakana goza de gran fama y es cita obligada para los amantes del belenismo, sobre todo por la maestría en la perspectiva, un dominio de la profundidad de campo que conjugan con elementos naturales y la colocación de figuras a diferente escala. Lo cierto es que el gusto por el trabajo bien hecho y la ilusión mueven cada año a un grupo de sakandarras a destinar buena parte de su tiempo libre a esta afición, artesanía elevada a arte.
Pero para mantener viva la llama del belenismo en Sakana hace falta que entre savia nueva al grupo. “Aunque el número de socios no ha variado, 43 en total, venimos ocho y todos ya jubilados. No hay juventud”, lamentan.
La exposición se puede visitar hasta el 7 de enero. El horario de lunes a sábado es de 17.30 a 20.00 horas y los domingos y festivos también abre sus puertas por la mañana, de 13.30 a 14.30 horas, y por las tardes de 17.00 a 20.00 horas. Asimismo, se pueden ver otros dos belenes de la asociación en la parroquias de Olazti y Altsasu.
