El grupo de Voluntariado urbano de Tafalla / Hiriko Bolondresak presentó ayer en el Parque del Conde el resultado de uno de sus últimos trabajos: una piedra de 4x3 metros y 8 toneladas de peso que recoge en su superficie el plano de la localidad así como sus diferentes atractivos rurales. En concreto, se trata de un trabajo manual y artesanal donde, sobre la superficie plana de la mesa, los y las voluntarias han esculpido y grabado, de forma manual, con exactitud y siguiendo las anotaciones de los planos existentes en los archivos municipales, una representación cartográfica de los muy distintos detalles que jalonan el conjunto del territorio rural de Tafalla.

“Estas dos piedras, tanto la de mesa, como la que hace de soporte, fueron extraídas del término El Salobral de Tafalla, de una finca propiedad de Lorenzo González Chamaco. El propio Chamaco nos donó de forma gratuita las piedras al grupo de Voluntarios y sobre ellas hemos estado casi dos años trabajando”, explicaban los artífices del proyecto durante la presentación. 

Intención y deseo

Los y las voluntarias detallaron que el término de Tafalla que representa la piedra es el espacio existente delimitado por los pueblos de Artajona, Pueyo, Sansoain, San Martín de Unx, Olite, Falces, Miranda de Arga, Berbinzana y Larraga. “Tafalla cuenta con 980.000m2 de terreno, de los cuales 174.500 m2 son urbanos y 805.500m2 rústicos. Es decir, el suelo rural de Tafalla supone el 96,4% del total, siendo aproximadamente el 55%, suelo comunal. Ese espacio es en efecto, el que hemos recogido, diseñado y plasmado en la piedra”, afirmaban, mientras añadían que “dentro de estos términos existen múltiples edificaciones que hemos incorporado al diseño, como por ejemplo 36 corrales, casetas rústicas, 16 caseríos, 20 corralizas o 33 abejeras. Así mismo, la persona que se acerque a curiosear el trabajo, observará que en la piedra están recogidas un buen número de fuentes, balsas de acumulación de agua, algunos abrevaderos para ganado y varias lagunas”.

“Todos estos trabajos son los que hemos esculpido y gravado en esta piedra para mostrarlo a cuantas personas deseen conocer algo de nuestro cercano pasado y orientarse fácilmente dentro de nuestras fronteras. De momento, el trabajo que tanto nos ha costado, estará ubicado en este entorno del Parque del Conde, con la esperanza de que una vez terminadas las obras, se traslade a Recoletas, un lugar más céntrico donde pueda ser más visitada”, finalizaban, no sin antes dar las gracias a todas las personas del Ayuntamiento que han ayudado a que este proyecto se llevase a cabo.

4 años de andadura

El grupo de Voluntarios nació durante el año 2019 con la intención de ofrecer un apoyo altruista a las laboras que realizaba la brigada municipal así como la de crear un entorno más agradable donde vivir, mejorando mediante el auzolan y el trabajo desinteresado los lugares de la localidad y su entorno que se encuentran en estado de abandono.