Sunbilla es un vendaval por carnaval

Sunbilla ha sido este domingo un vendaval, no sólo por el viento, sino un vendaval de disfraces. Se temía que lloviera, que lo hizo cuando iba a terminar el recorrido, y como comentaba un sunbildarra “no hay peor cosa que carnavales lloviendo”. El viento causado por la borrasca Herminia fue molesto a ratos, pero no importó para que cientos de personas acudieran a la localidad para disfrutar del colorido y divertido desfile. 

Desde primera hora las cuadrillas empezaron a calentar motores con sus almuerzos y con puntualidad británica iniciaron su desfile. Un desfile en el que participan además de cuadrillas, familias enteras y gente de toda edad. Como es costumbre las primeras carrozas en aparecer eran las que repartían a modo de bienvenida a los asistentes un tentempié, que era muy agradecido, organizado por el pueblo y jóvenes todo el material se cocina en la sociedad Ulibeltzak donde unos 30 socios mayores de 60 años se encargan de hacer las tortillas con “huevos de Sunbilla” y que este año han batido el record con 2.500 huevos, 1.100 huevos más que el año pasado, también se repartió 400 litros de salda, 80 kilos de castañas, 500 talos con queso (20 kg de queso), 120 barras de pan y 125 litros de vino, casi nada.

Carrozas 

A continuación la txaranga Igandea de Barañain, que repite otro año más, abría paso a las diferentes carrozas. La primera carroza fue ‘Maritxu Ponpis’ que con toda su tropa no dejó de bailar y volar desde la chimenea, tras ella varias gallinas huían de un temible zorro gigante en ‘Olluk larri’ (pollos en peligro), les seguían Asterix y Obelix con su carroza y romanos. Un simpático grupo de góspel cantaba sin parar en la ‘San Tiburtxio txurtx’. Jubilados hacían gimnasia con clases de baile de ‘Jubilo dance’ y un grupo de veteranos de la tercera edad se engancharon al Hip Hop. A continuación se dejaron ver por Sunbilla ‘Alvin y las ardillas’ y una cuadrilla de autos de choque no dejaban de chocarse en ‘Ze auto ta ze parranda’.

Y aparecía la que quizás fue la carroza más espectacular del día de este domingo, donde una cuadrilla hizo su propia interpretación de la historia y puso a pelear a vikingos en una guerra contra cruzados. Un espectacular castillo, una catapulta y un barco vikingo llamó la atención al personal. Cerrando el desfile unos ‘cazafantasmas’ tuvieron mucho trabajo para capturar a todos los fantasmas que correteaban por las calles del pueblo. Cerrando el desfile unos simpáticos afiladores afilaban tijeras, cuchillos y cualquier material cortante y jóvenes montaron una gran fiesta en la ‘Sunbillako elur besta’.

Justo al finalizar el recorrido comenzó la temida lluvia, pero poco importó porque más de un centenar de personas se reunieron en la sociedad Ulibeltzak para reponer fuerzas con una comida y seguir la fiesta por la tarde.

 De esta forma, Sunbilla pone fin a sus carnavales que comenzaron el pasado viernes y pasan su testigo a Ituren y Zubieta que celebrarán sus días fuertes este lunes y martes. Más adelante quedará más carnaval, pero ya en marzo, Elizondo y Doneztebe el día 1, Bera y Lesaka el 2 de marzo y Arizkun y Erratzu el 4 de marzo, pero esa es ya otra historia.