Concienciar y sensibilizar sobre el cuidado del medio ambiente, al tiempo que pasaban un buen rato en el río bajo el sol, era el objetivo de la actividad que acogió Lodosa este fin de semana. Y es que la ONG Y os lo cuento, de Pamplona, le propuso al Ayuntamiento organizar una limpieza de vertidos por la orilla del río Ebro con kayaks. Dicha entidad, a pesar de no tener relación con la localidad ribera, organiza una vez al año una actividad relacionada con el medio ambiente, y pensaron en Lodosa. Aunque la idea era haberla hecho en septiembre del año pasado, el fin de semana salió malo, así que decidieron trasladarla a primavera; en este caso, además, vinculada al mes del deporte.
De la mano de dos instructores de Mugitu, los allí presentes recibieron unas breves instrucciones antes de montarse en las piraguas dobles ataviados con chalecos, cascos y bolsas de basura.
De acuerdo con Mireia Lana, lodosana encargada de movilizar la cita, “subimos con los kayaks hasta los 500 metros y, divididos en dos grupos, bajamos limpiando las dos orillas hasta el molino, todo El Medianil”.
Para Lana, “la actividad se pasó a través de muchos grupos y la verdad es que la respuesta fue bastante escasa. Es cierto que las actividades de limpieza no llaman mucho, pero con los kayaks pensábamos hacerla más atractiva. Fue un rato muy motivador y fue muy, muy chulo ver el paisaje desde el río”.
Garrafas, latas, pañuelos...
En cuanto a la basura recogida, eso sí, buenas noticias: apenas salieron grandes vertidos más allá de algunas garrafas y corchos. Además, hasta el municipio se acercó un grupo de hombres y mujeres, usuarias de un centro para personas con discapacidad psíquica y física, que limpió el entorno del parque El Medianil dado que el camino era más accesible. Otras personas optaron por irse hacia las pistas por toda la orilla limpiando las latas o pañuelos que aparecieron a su paso.
Para terminar, los presentes disfrutaron de una txistorrada que, junto con la actividad, financió el Consistorio. El evento se suma a la limpieza que hicieron a pie por la peña hace un par de meses y, aunque de momento no tienen programada otra quedada, “es cierto que salimos menos, pero no lo dejamos”, concluye Lana.