Las obras en los ascensores de Descalzos se prolongan por una avería inesperada

Los trabajos de reparación y mantenimiento de los ascensores urbanos de la calle Descalzos se prolongarán una semana más de lo previsto inicialmente debido a la aparición de una avería inesperada. De esta forma, aunque estaba previsto que el próximo lunes comenzara a funcionar una de las cabinas, finalmente será el 4 de agosto cuando esto ocurra. Según informó el Ayuntamiento, ambos elevadores permanecerán cerrados hasta esa fecha.

El ascensor, que une el barrio de Rochapea con el Casco Antiguo de la ciudad, está siendo sometido a unos trabajos de sustitución completa, ya que están próximos a cumplir 20 años de funcionamiento desde su inauguración en 2008.

Las obras se van a prolongar hasta finales de noviembre. No obstante, ello no suponía la paralización completa del servicio, ya que una de las dos cabinas iba a retomar la actividad el próximo lunes, día 28, para facilitar la accesibilidad después de dos semanas de parada técnica. Sin embargo, durante esa parada, se ha detectado una avería que requiere su reparación. La llegada de las piezas que deben sustituirse y su posterior instalación va a suponer una semana de demora en la reapertura.

Una vez acometida esta reparación imprevista, se va a proceder a la instalación de una valla de separación entre las dos cabinas por motivos de seguridad. Después, se continuará con la reforma mecánica y de estructura planeada, manteniendo en todo momento el funcionamiento de uno de ellos hasta la total finalización de la reforma prevista para finales de noviembre.

Desnivel de 29 metros

La instalación de estos ascensores urbanos, que salvan un desnivel de 29,6 metros entre los corrales del Gas y la calle Descalzos, fue todo un hito para la ciudad. Estos ascensores realizan un total de 570.000 viajes al año, estimándose una utilización de 5.900.000 personas por año.

El uso, la antigüedad y la falta de acciones preventivas y correctivas han hecho que esta instalación esté ya mecánicamente obsoleta, lo que da pie a averías continuas. Es por ello que se ha previsto la sustitución completa de todas las partes mecánicas y de seguridad de uno de los dos ascensores que configuran la instalación, si bien se realizará por partes.

Revisiones

En una primera fase, es imprescindible garantizar el correcto funcionamiento del otro elevador para evitar que la ciudadanía se quede sin este servicio por un largo periodo de tiempo. Por ello, previamente, se ha previsto hacer una revisión a fondo de este segundo aparato elevador, y unos trabajos previos en el edificio que garanticen la seguridad en las obras y en los usuarios.

La segunda fase de estos trabajos se prolongará desde agosto y durante todo el otoño. En esta fase de la intervención se reformará completamente la instalación mecánica de uno de los dos ascensores, debido al estado de desgaste que presentan ambos equipos. El presupuesto global de inversión en estas dos primeras fases de actuación, con el que se reforma la mecánica y estructura de uno de los ascensores, se eleva a los 259.000 euros.