elizondo - Andone Garde, Izargi Zumarraga, Garbiñe Elizalde y Itziar Ortuoste, miembros del Comité de Trabajadoras de la residencia de ancianos Francisco Joaquín Iriarte de Elizondo, han denunciado que la situación de la residencia de Elizondo (149 residentes) vuelve a demostrar que la precariedad es la única consecuencia de la privatización de los servicios públicos. En la comparecencia recordaron que hace poco hubo una nueva oportunidad de acabar con la privatización de la residencia pero no fue así pues el patronato municipal decidió prorrogar por cinco años la gestión con la empresa IDEA. El sindicato lamenta que de los nueve miembros que componían el patronato votaron siete, y entre ellos el único que votó a favor de reconvertir en pública la residencia fue el representante de EH Bildu, con lo que, según LAB, “queda más que claro que tanto las trabajadoras como los residentes estamos totalmente desamparados por lo que al patronato se refiere”. Las trabajadoras del centro señalan que “el servicio que dan las residencias cumple con una necesidad básica de la sociedad, y al dejar la gestión de la misma en manos privadas, el objetivo es meramente de beneficio económico; es absolutamente inadmisible”. Remarcan que es mucho peor si para ello se precarizan las condiciones de trabajo y se empeora la calidad del servicio ya que, según denuncian, “a consecuencia de la privatización, el servicio que reciben los residentes y las condiciones en las que se encuentran, son claramente peores”.
condiciones laborales El Comité de Trabajadoras comenta que en 2019 “se ha conseguido uno de los logros más importantes de los últimos años en nuestro sector en Nafarroa”, refiriéndose a una norma común a nivel provincial que regula tanto elementos organizativos como condiciones laborales de las trabajadoras para aquellos centros con plazas concertadas. Denuncian que esas mejoras no se ha podido aplicar en la residencia Francisco Joaquín Iriarte “porque la empresa privada IDEA, la cual gestiona nuestra residencia de manera unilateral y sin conocimiento del Ayuntamiento, decidió no presentarse a esas plazas concertadas”. Por lo visto, sin esas plazas no existe obligación alguna de cumplir con esas condiciones mínimas. Añaden que para cuando tuvieron noticia de este hecho ya era tarde.
LAB afirma que detrás esta decisión hay dos razones: el no querer dignificar las condiciones laborales de las trabajadoras y el querer situarse fuera de la norma general, dejando claro que las trabajadoras y los residentes no les importan en absoluto, y que el beneficio económico es lo único que les importa.
El sindicato ha creído necesario plantear este tema de manera pública, por un lado porque siente que las trabajadoras están totalmente desprotegidas y, por otro lado, porque consideran importante que los habitantes de Baztan conozcan en qué condiciones se encuentran tanto un servicio básico del valle y como las trabajadoras del mismo.
Para terminar, inciden en que para solucionar esta situación, “el primer paso, pero no el único, que se debe de dar es que la residencia vuelva a tener una gestión pública, porque mientras la gestión del centro siga siendo privada, las condiciones laborales y el servicio seguirán siendo precarios”.
Precariedad. El Comité de Trabajadoras de la residencia denuncia la precariedad existente en la misma, “consecuencia de la privatización de los servicios públicos”.
Publicación. Apuestan por la publicación del servicio para que los residentes reciban un buen servicio y las condiciones de las trabajadoras sean dignas.
10
años son los que lleva IDEA gestionando la residencia de ancianos Francisco Joaquín Iriarte de Elizondo, órgano autónomo a cargo del Ayuntamiento de Baztan. Hace pocos meses el patronato prorrogó por 5 años más el contrato.
