- Ecovidrio y el Ayuntamiento de Baztan han puesto en marcha la campaña solidaria Recicla vidrio por ellas con motivo del Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Mama, que fue ayer. Ecovidrio, ha impulsado por quinto año consecutivo la campaña Recicla vidrio por ellas. Una iniciativa que tiene como objetivo movilizar a la ciudadanía a reciclar envases de vidrio para cuidar del medio ambiente y contribuir así con una causa solidaria, la prevención del cáncer de mama.

Durante las próximas semanas, 2 iglús rosas estarán ubicados en la Plaza de los Fueros de Elizondo. Los envases de vidrio depositados en estos contenedores serán transformados por Ecovidrio en una donación a la Fundación Sandra Ibarra de Solidaridad Frente al Cáncer.

En esta ocasión, la campaña se ha extendido por más de 140 localidades de todo el estado. Además, la entidad ha contado con Sandra Ibarra, Presidenta de la Fundación que lleva su nombre, como embajadora del proyecto.

Como símbolo de la concienciación y solidaridad con el cáncer de mama, Agatha Ruiz de la Prada ha diseñado un miniglú especial para la ocasión, en el que se destaca el lema de la Fundación Sandra Ibarra: "Llenos de vida". El miniglú se podrá adquirir a través de la web Miniglú.es, y los beneficios se destinarán a la Fundación Sandra Ibarra para contribuir a la prevención e investigación del cáncer.

Según los últimos datos relativos a 2019, los habitantes de Baztan reciclaron un total de 321 toneladas de envases de vidrio, lo que supone que cada habitante recicló de media 41,4 kilogramos.

Respecto a la tasa de contenerización, Baztan se sitúa con una media de 73 habitantes por contenedor, contando con un total de 107 iglús para los residuos de envases de vidrio instalados.

La Fundación Sandra Ibarra es una organización sin ánimo de lucro con una trayectoria de doce años sumando esfuerzos frente al cáncer.

Durante estos años, la Fundación ha invertido su tiempo en dar impulso a campañas y financiar proyectos de investigación, sensibilización y prevención frente al cáncer, así como al desarrollo de la humanización de la sanidad.

En los últimos años, ha detectado un aumentado en los índices de supervivencia y con ello surge un nuevo paciente: el superviviente de cáncer. Por ello en 2017, con el objetivo de hacer frente a las necesidades asistenciales existentes durante la enfermedad y las que surgen en el periodo de transición en el que ya no hay tumor ni tratamiento, nace la primera escuela de pacientes y supervivientes de cáncer, la Escuela de Vida de la Fundación Sandra Ibarra. www.fundacionsandraibarra.org.