lesaka. El Plan de inundabilidad elaborado por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) fue presentado al Ayuntamiento de Lesaka el pasado 18 de enero. El Plan obliga a derribar la sala Zambra, además de siete puentes de la localidad, así como a cambiar algunos proyectos e incluso a expropiar terrenos cercanos al río Biurrana.

El alcalde de Lesaka, Juan Fermín Mitxelena (PNV), explica que "los informes que se realicen serán vinculantes, así que el Plan no se puede alterar. Si no lo llevamos a cabo habría que derribar incluso alguna vivienda y no podríamos seguir adelante con la Casa de Cultura en el antiguo convento". También correría peligro el desarrollo urbanístico de Landazelaiak. "Así que el derribo de Zambra y de los siete puentes no tiene vuelta atrás", afirma el alcalde.

El edificio que albergó la sala multifuncional Zambra entre septiembre de 2002 y finales de 2004 se tendrá que demoler. El Ayuntamiento barajó en 2006 la posibilidad de adquirirlo como futuro espacio cultural, pero el Plan de Inundabilidad es tajante al exigir su "eliminación física". El Ministerio de Medio Ambiente asumirá los 2,5 millones del derribo y de todas las medidas contempladas, así como las posibles indemnizaciones. Se ocuparán de los proyectos, así como de la contratación de las obras, mientras que la CHC realizará el seguimiento de las actuaciones.

El Plan de Inundabilidad obligará también al derribo de siete puentes de la localidad, cuatro de ellos peatonales y tres rodados. Se trata de los cuatro puentes de acceso a Arcelor Mittal y Beheko Errota, que serán eliminados y no se sustituirán, además de los de Legarbaratza y Xatur Etxea que serán sustituidos por otros que cumplan las condiciones de la CHC tras su derribo. El puente que da acceso desde la rotonda Tomasenekoborda a la zona industrial de Otsango se ampliará con un ojo más, para lo que se utilizará parte del terreno que estaba dirigido para zona industrial.

El Plan también señala que en algunas zonas se le tendrá que dar de anchura al río Biurrana de hasta 23 metros, cuando actualmente no llega a los diez metros prácticamente en ningún punto. "Afectará a muchos vecinos que cuentan con terrenos junto a sus casas. Probablemente se les expropiará", señala Mitxelena.

También habrá que encauzar el río Onin y en el caso del desarrollo urbanístico de Landazelaiak, "se tendrá que alejar el proyecto del río entre 12 y 15 metros". Según Mitxelena, las obras comenzarán con urgencia este mismo año.