El alcalde de Uharte en funciones mentía el miércoles y el jueves su mentira ya le había atropellado. Pretendió utilizar un tema tan sensible como la seguridad de la escuela infantil de Perez Goiena para intentar empañar la gestión del anterior grupo de gobierno acusándole de inacción y ocultar información, pero ha conseguido el resultado contrario: quedar como un personaje sin escrúpulos, capaz de todo para conseguir la Alcaldía.

Cuando se cumplían 11 días de la dimisión de Amparo Lopez y el alcalde en funciones Iñaki Crespo, sigue sin convocar el pleno para la designación del nuevo alcalde, la derecha de Uharte ha hecho otro intento desesperado para conseguir la Alcaldía que las y los uhartearras no le dieron en las urnas. Un intento que, dicho de paso, ha fracasado estrepitosamente.

Resulta que el polémico edificio en el que se ubica la escuela infantil de Perez Goiena y que ahora se propone que no reabra sus puertas la primera semana de septiembre cuando comience el curso 2019-2020, no es nuevo. Se inauguró en 2004, siendo uno de los proyectos estrella del GIH, entonces en la Alcaldía. Como se ha sabido más tarde, ese edificio incumplía ya por entonces la normativa vigente. Además, los materiales de su cubierta, su sistema de calefacción, su distribución, ubicando a los lactantes en un primer piso sin salida de emergencia, su color negro y sus múltiples defectos constructivos han obligado a que desde el primer momento, el Ayuntamiento de Uharte haya tenido que invertir varios cientos de miles de euros para solventar sus deficiencias durante estos 15 años.

También en la legislatura que terminó en junio, se tuvieron que realizar diversas obras y reparaciones, se solicitaron las opiniones técnicas pertinentes y se realizaron varias comisiones además de visitas a la escuela con personal técnico y político. Se transmitió a las familias y personal de la escuela la misma información que se nos dió a los grupos políticos tranquilizándoles, porque eran cuestiones que se tenían que llevar a estudio. Así mismo, se comenzaron a realizar las gestiones oportunas con Educación del Gobierno de Navarra de cara al curso que viene, previendo todas las posibilidades, incluso que si no pudiese usarse dicho edificio, las niñas y niños pudieran ubicarse en la escuela Virgen Blanca, todo ello con pleno conocimiento del señor Crespo y de todos los grupos municipales.

Y así terminó la legislatura, y comenzó esta nueva en que nos encontramos. Ahora hemos sabido que el informe externo solicitado por el alcalde Alfredo Arruiz dice que el espesor de la pintura ignífuga no es el adecuado, que llegó al ayuntamiento el 30 de julio y que fue puesto en manos de Iñaki Crespo el 12 de agosto. En consecuencia, es rotundamente falso que Alfredo Arruiz ocultase ninguna información. Es precisamente Iñaki Crespo quien ha ocultado el informe de que disponía al resto de las y los concejales y a las madres y padres de la Escuela Infantil buscando el momento que consideraba adecuado para crear alarma social en los medios de comunicación.

Su actuación ha dejado bien claro que ni a la derecha de Uharte ni a su portavoz Iñaki Crespo le importa en absoluto la seguridad de la Escuela Infantil, sus niñas y niños ni sus familias. Teniendo en cuenta cuáles son sus prioridades mientras ostenta la Alcaldía en funciones, y teniendo en cuenta sus maneras, (el jueves mismo se negó a contestar a las preguntas en la junta de portavoces previa a la rueda de prensa), antes de que cometa alguna otra tropelía, desde EH Bildu Uharte le exigimos que convoque inmediatamente el pleno de investidura y que si le queda un poco de dignidad no se postule como candidato ya que con sus burdas mentiras y manipulaciones se ha inhabilitado completamente para poder ser alcalde.El autor es portavoz del grupo EH Bildu Uharte