- Isaac Corres es el alcalde de Ancín y uno de las primeras víctimas del COVID-19 en Navarra. Ahora se ha restablecido y ha vuelto a su trabajo tanto a sus puesto de bombero en el parque de Lodosa como a la casa consistorial de Ancín, uno de las ocho localidades de Valdega en Tierra Estella. "Mis síntomas no fueron muy fuertes. El día 13 de marzo estuve trabajando y el 14 tuve las primeras señales y ya estuve quince días de cuarentena". Una cuarentena no especialmente violenta "solo tuve tos dos días y apenas uno de fiebre".

Después de mes y medio ya puede decir que el suyo es uno de los nueve infectados con los que cuenta su área de salud de Ancín/Amescoa que apenas llega a los 3 casos por mil habitantes en los que va de pandemia. Con todo, Corres aseguró que fue duro por el aislamiento: "Estuve solo en la habitación y en un baño". El tiempo se le hizo largo al primer edil de Ancín, "en casa con la mascarilla, no cocinaba, ni podía ayudar en las tareas, y por supuesto ni siquiera podía salir a pasear a nuestra perra". Aseguró que en tres días comenzó a notar mejoría y que su situación cambió. "Comencé a hacer deporte y a leer". También reconoció que pronto se reenganchó con sus labores municipales gracias al móvil y al ordenador con los que pudo estar al día de las tareas del ayuntamiento. "Fueron días largos pero pude estar activo. Tras la cuarentena, las pruebas dieron negativo y volví al trabajo", señala. Corres no fue consciente del momento en que pudo infectarse. "Por mi trabajo conduciendo ambulancias y en contacto directo con gente no sé cuándo pude coger el coronavirus". Lo cierto es que además de su condición de alcalde y bombero, Isaac es también donante. "Me puse en contacto con la asociación Adona para decirles que era donante y que había pasado la infección y que contaran conmigo. Dijeron que estaban desarrollando un estudio y que lo tendrían en cuenta pero todavía no me han llamado", subraya.

Con todo, Ancín como muchas de las pequeñas localidades de Navarra, no ha descuidado los trabajos contra la pandemia. "Estamos intentando conseguir mascarillas para todos los vecinos y queremos que permitan la apertura de los huertos para autoconsumo", explica. Corres repasó las diferentes medidas tomadas durante este tiempo: "Desde el inicio de la pandemia, la sede del ayuntamiento ha estado cerrada, no acudiendo los trabajadores de forma presencial en las oficinas del edificio. Hemos implementado las herramientas necesarias para que puedan realizar su trabajo desde casa, mediante teletrabajo, en el horario de atención al público habitual. Igualmente, el correo electrónico, la web municipal y el teléfono siguen operativos".

Por otra parte, el alcalde de Ancín señaló que desde el inicio de la situación provocada por el COVID-19, el personal del Ayuntamiento dedicado a labores de servicios múltiples "ha venido realizando las tareas de limpieza y desinfección en base a las directrices que hemos ido recibiendo desde Gobierno de Navarra. Los primeros días la desinfección se hacía en los lugares especialmente críticos por la mayor afluencia de personas, como son las inmediaciones del centro de salud y la farmacia. Para posteriormente ir aumentando las zonas desinfectadas a la parada de autobús, puntos de contenedores, y las calles con mayor número de vecinos", finalizó.