La música es uno de los ingredientes principales de toda fiesta que se precie y así lo es también en el caso de Elizondo. Sobre todo, en el día de ayer, dedicado a los aitetxis y amatxis, tuvo un papel fundamental. Y es que desde temprano por la mañana, las dianas ya empezaron a sonar por las calles.
Después, y acompañando a la comparsa de gigantes y cabezudos, tampoco pudo faltar la música. Al mediodía, llegaba uno de los momentos más esperados del día, con el recital de la banda Recreo de Elizondo. Este año, además, han estrenado un nuevo escenario. Así, el público se reunió en los jardines de la iglesia, la mayoría intentando buscar alguna sombra para huir del calor de esas horas en las que el sol pegaba fuerte.
Con la colaboración especial de los txistularis Asier Biela y Jexux Baylon, Baztango Gaitariak y el acordeonista Unai Aguinaga, la banda interpretó un amplio repertorio bajo la dirección de Pello Etxebeste Zayas. Las canciones que se pudieron escuchar fueron: Mendirik-mendi, Pixar movie magic, The ultimate bee gees, Coco, Betikoskorri, Okilla, Elizondoko jota y Amaiurko porrusalda.
Aparte de los eventos musicales, ayer por la mañana la piscina Giltxaurdi abrió sus puertas para todas las personas que quisieran refrescarse. Acompañados por el buen tiempo, los txikis pudieron divertirse en los hinchables acuáticos.
Por la tarde, los mariachis Los Tajudos del Norte ofrecieron un concierto en la residencia de mayores, donde residentes y familiares pudieron cantar y bailar en este día en el que especialmente se quiso poner el foco en las personas mayores de Elizondo.
Por otro lado, también se celebró el XI. Campeonato de mus de Elizondo y la final del partido de pelota de Txaruta Pilota Elkartea. A esa misma hora, en la plaza se llevó a cabo la ginkana que finalizó con una Txokolatada. Además de esto, la calle Giltxaurdi acogió el I. Campeonato de Lanzamiento de Boneta.
A las 19.00 horas, llegaba el momento de los bertsolaris. Con Xabi Maia como presentador, Saioa Alkaiza, Maialen Lujanbio, Amets Arzallus y Aitor Mendiluze mostraron sus habilidades ante el micrófono y un público bertsozale.
Después, le siguió la tradicional cita para bailar las danzas populares y las mutildantzas. Por último, sobre las 22.30 comenzaba el concierto del grupo The Drunken Barrels, que llenó de ritmos irlandeses la plaza, y tras esto, le tocó el turno al grupo Kamuts.
