PAMPLONA- Se respiraban nervios en el patio del Palacio Condestable antes de que comenzara la entrega de premios de la XVIII edición del Concurso Escolar de Educación Vial. Y así lo confirmó Gabriel Larrayoz, del colegio de educación especial El Molino y ganador del segundo premio de dibujo especial. “Cuando he llegado estaba muy nervioso, pero todos mis amigos me han apoyado con sus aplausos y eso me ha tranquilizado. De no haber estado aquí, si hubiese venido solo con mi madre, los nervios hubieran sido mucho mayores”, confiesa. En su dibujo Gabriel plasmó un policía que dice a los ciudadanos que circulen despacio y con cuidado. Junto con él, otros 17 chiquillos fueron premiados en esta edición del concurso en la que participaron 1.923 escolares de 16 colegios.

Todos los trabajos presentados fueron divididos en tres categorías (dibujo especial, dibujo infantil y eslogan) en función del curso escolar, y los autores de los 18 mejores recibieron como galardón una bicicleta de montaña y un casco que fueron entregados por la concejala delegada en funciones de Seguridad Ciudadana y Convivencia Itziar Gómez y representantes de la Policia Municipal y del Instituto Mapfre. Los mejores de cada categoría, además, recibieron un mallot. Dos de los premios reconocieron también a los centros escolares con mayor participación en el concurso, que este año han recaido en Iturrama y El Molino.

EDUCACIÓN VIAL Desde el año 2002 el Ayuntamiento de Pamplona y el Instituto Mapfre de Seguridad Vial firman un convenio que posibilita la convocatoria de este concurso escolar. Su objetivo es promocionar el conocimiento y los valores de educación vial desde edades tempranas. Por eso, antes de convocar el concurso, los alumnos reciben una clase práctica de la mano de la Policía Municipal. “Hacemos una actividad diferente con cada curso para ir sumando conocimientos”, afirmó un miembro del cuerpo policial.

El método parece ser efectivo. Ahmed Kharbach, ganador del segundo premio de dibujo infantil en 3º de Educación Primaria, dibujó una rotonda repleta de coches porque “en las rotondas hay que tener mucho cuidado y nunca hay que saltarlas. Siempre hay que rodearlas”. Además de esto, en la sesión impartida por la Policía Municipal también aprendió las señales y las normas de conducción, y prometió aplicarlas todas con su nueva bicicleta. En cursos superiores, cuando las nociones prácticas ya han sido interiorizadas, se pasa a cuestiones más bien éticas, pero no por eso menos importantes. Así lo confirmó EiderRodríguez, ganadora del segundo premio del eslogan de 6º de Educación Primaria. En su boceto quiso hacer hincapié en la importancia de no beber alcohol si se va a coger el coche. “Hay que respetar las normas siempre porque además de poner tu vida en peligro, también pones la de los demás”, dijo muy convencida. Con ellos como ejemplo, las carreteras del futuro serán más seguras sin ninguna duda.

los galardonados