pamplona - Tras la clausura el pasado miércoles del edificio okupado en la calle Jarauta 13, la sociedad municipal Pamplona Centro Histórico procedió ayer al cierre de su estructura de forma definitiva, candando las ventanas y colocando bloques de hormigón en el portal de forma que los posibles accesos queden cerrados antes de San Fermín. El inmueble alberga un total de 6 viviendas, cuatro de propiedad municipal y había sido señalado por los vecinos como uno de los supuestos narcopisos del Casco Viejo. Vivienda por tanto desalojada sin esperar a que llegara la orden judicial.

PCH también va a proceder al vaciado de enseres y a la limpieza del edificio de Descalzos, 48, bloque que fue desocupado la semana pasada. Policía Municipal comprobó que el inmueble se mantenía vacío. La movilización de los vecinos ha sido continua desde que una joven denunciara haber sufrido una violación a principios de abril. La gota que colmó el vaso fue la agresión sufrida por el dueño de un bar de la misma calle la madrugada del viernes 8 de junio.

Alrededor de las 20.17 horas del pasado miércoles Policía Municipal se personó en el inmueble en uno de cuyos pisos los agentes encontraron a tres personas. Durante su identificación, dos dijeron encontrarse de paso y una tercera reconoció residir allí de forma irregular. Tras una conversación en la que se le instó a abandonar el edificio, el ocupante aceptó marcharse sin ningún tipo de enfrentamiento. Se cerró los accesos al interior de forma provisional mediante tablones y planchas de madera y ayer fue tapiado, algo que también se hará en Descalzos, 48. - D.N.