pamplona - Navarra Suma sacó ayer adelante la nueva regulación de los tributos y precios públicos que estarán vigentes en Iruña desde el 1 de enero de 2020 aprovechando que los grupos de la oposición contaban con un representante menos ya que todavía no ha tomado posesión el concejal de EH Bildu que sustituye a la dimisionaria Amaia Izko.

El voto de calidad del alcalde Enrique Maya decantó el resultado de las votaciones a favor del equipo de Gobierno cuando se produjo un empate entre los 13 concejales de Navarra Suma y los 13 que sumaban ayer EH Bildu, PSN y Geroa Bai, lo que permitió la aprobación de las ordenanzas fiscales y normas reguladoras de precios públicos.

Entre las novedades que presenta el proyecto de Navarra Suma destaca la inclusión de una tasa única por la ocupación del espacio público, pensada básicamente para que los colectivos y asociaciones de los barrios tengan que pagar por instalar casetas o barracas en las fiestas, lo que no sucedía hasta ahora.

También se aprobó que el Ayuntamiento pamplonés bonificará el impuesto de circulación para vehículos ECO y “0 emisiones”, en un 25% y 50% respectivamente, además de eximirles de pagar zona azul a los “0 emisiones”.

Asimismo, se han reducido las tarifas de los apartamentos tutelados para rentas vulnerables con tarifa progresiva en todos los tramos y de la Escuela de Música Joaquín Maya y de la Escuela de Artes y Oficios Catalina de Oscáriz, ponderando ingresos por miembros unidad familiar frente al baremo de la renta básica vigente en la legislatura pasada. Otras medidas son la reducción del tipo impositivo de viviendas deshabitadas y la introducción del concepto, requisitos, y acreditación de familia monoparental.

debate La concejala delegada de Servicios Generales María Echávarri fue la encargada de defender la propuesta, que no “supone ninguna subida para los pamploneses e incorpora rebajas fiscales y bonificaciones”. Con respecto a la tasa única por ocupación de los espacios públicos, enumeró los casos de las comisiones de fiestas de San Juan, Rochapea o Txantrea que no tuvieron que abonar nada, frente a otros grupos, como los libreros, que sí tuvieron que abonar una tasa.

Por parte de EH Bildu intervino Marian Aldaia, que criticó los nuevos criterios aplicados para las tasas en la escuela de música Joaquín Maya o en la de Catalina de Oscáriz. “No tiene mucho sentido que una familia con 3 miembros y unos ingresos de 2.700 euros tengan unos descuentos del 50%”. La portavoz abertzale señaló que no están claros los criterios para la cesión de los locales municipales y abogó por respetar la pluralidad de los pamploneses.

La socialista Maite Esporrín alertó de que los ingresos municipales se han ido reduciendo por las políticas municipales de los últimos años que no han querido subir las tasas. Se mostró contraria a la rebaja de los impuestos a las viviendas vacías -que Echávarri defendió con el argumento de que penaliza el ahorro y no tiene efectos en el incremento de la vivienda de alquiler- pero logró que Navarra Suma apoyara dos de las enmiendas presentadas (rebajas en los enlaces matrimoniales y de los servicios funerarios).

Javier Leoz (Geroa Bai) se mostró muy crítico con la decisión de variar el baremo de la renta de inclusión social por el salario mínimo, con la tasa única por la ocupación del espacio público y por la rebaja del impuesto a las viviendas vacías, que podría ser aplicado a partir de 2021.