PAMPLONA - La portavoz del PSN en el Ayuntamiento de Pamplona, Maite Esporrín, propuso ayer la constitución de una mesa de trabajo para abordar el perfil lingüístico de las escuelas infantiles municipales y así tratar de llegar a un pacto político que dé “estabilidad” a estos centros y que no sea un tema que quede “al albur” de quien gobierna en cada momento. En rueda de prensa, Esporrín indicó que éste es un tema “sensible” y que presentarán una declaración a la Comisión de Ciudadanos del 11 de febrero para que se aborde la definición de los perfiles lingüísticos de las escuelas infantiles y se haga “con cuidado, con estudio y atendiendo a las necesidades sociolingüísticas de la ciudad”. La edil socialista comentó que fue “un grave error” cómo se realizó el cambio lingüístico en varias escuelas en el año 2016, “principalmente por la manera de cómo se llevó a cabo, de manera atropellada”. “Los tribunales han dado la razón a padres y madres”, recordó, para señalar que el equipo de gobierno va a proceder a la ejecución de la sentencia. Respecto a los cambios, dijo, comparte que se hagan de forma progresiva pero “no sabemos cómo va quedar definitivamente la oferta 0-3 y si se va a adaptar a las necesidades sociolingüísticas de la ciudad. De cuatro escuelas infantiles en euskera se va a pasar a una y media teniendo en cuenta que el cambio va a ser progresivo en Printzearen Harresi y San Juan”. Esporrín mostró su compromiso con “crear el perfil lingüístico acorde a las necesidades de cada momento y comprobarlo con estudios serios”. “Dada la experiencia que tenemos, pedimos que no se lleve a cabo el cambio de manera brusca y sin que sea avalado por estudios rigurosos”, dijo, para manifestar que se realice de manera “progresiva” y “teniendo en cuenta la comunidad educativa, no se puede hacer unilateralmente”. Reconoció que para este curso no será posible poner en marcha esta mesa de trabajo pero “si somos capaces, podría estar para el próximo curso”. “Queremos asegurar que el niño que empieza el ciclo 0-3 en un perfil lingüístico, lo termine en el mismo. Se puede hacer y ahí está el ejemplo de las escuelas infantiles del Gobierno foral”, subrayó.

listas de espera Por otro lado, Esporrín mostró ayer la preocupación de su grupo por las listas de espera en unidades de barrio como Casco Viejo, Rochapea y Txantrea, con más de cinco semanas para acceder a una primera cita en los Servicios Sociales. En concreto, con datos de octubre de 2019, el programa de acogida en el Casco Viejo arrastra un retraso de 5,4 semanas para la primera cita, seis en el caso de los dos servicios de acogida de Rochapea, y 6,6 en San Jorge. Su grupo se muestra de acuerdo en poner en marcha la nueva Unidad de Barrio de Lezkairu en el antiguo colegio José Vila, que también atenderá a vecinos de Santa María la Real, y “que se haga el cambio porque tener junto a Lezkairu a la Milagrosa estaba colapsando”. No obstante, indicó que “no hemos visto una mejora en el plan de choque para trabajar las listas de espera”. “Las personas que acuden a las unidades de barrio son las más vulnerables, las que peor lo están pasando y nos parece inaceptable que tengan que esperar semanas para tener acceso”, dijo, para pedir al equipo de gobierno que lo acometa “inmediatamente”.

Por su parte, el concejal socialista Xabi Sagardoy dijo que instarán al equipo de Gobierno a una “mejora de la limpieza del Jardín de la Galaxia”, en Yamaguchi, así como a “replantar los elementos vegetales perdidos, reparar los caminos y recuperar la fuente ornamental del jardín”. Sagardoy indicó que hay “un escaso mantenimiento de los elementos vegetales que conforman este espacio y se han perdido muchas plantas y otras muchas se encuentran secas, lo que genera una imagen de estado de dejadez y abandono de un espacio enclavado en uno de los principales parques”.