- Los principales trabajos de las obras de reurbanización y renovación de las redes de abastecimiento y saneamiento de cinco calles de la Txantrea (Mendigorria, Santesteban, Lesaka, Monreal y Etxarri Aranatz) se encuentran en los viales de Mendigorria y Santesteban. En las calzadas de Lesaka y Monreal, donde los trabajos debían haber comenzado el 15 y 27 de julio respectivamente, solo se han colocado unas vallas metálicas en las aceras, pero los operarios no han realizado todavía ninguna labor de relevancia. En la calle Etxarri Aranatz, el inicio de los trabajos también estaba previsto para el pasado día 27 y en este caso no se han colocado vallas metálicas que adviertan a los vecinos de que las obras vayan a empezar en un periodo corto de tiempo.

El proyecto está financiado por el Ayuntamiento de Pamplona, el Gobierno de Navarra a través del Plan de Inversión Local (PIL) y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona y cuenta con un presupuesto de 1.958.530,20 euros. Las obras incluyen la ampliación de las aceras a 3,5 metros, pasos de peatones elevados, asfaltado y el soterramiento de canalizaciones de servicios que ahora van por las fachadas. El proyecto ha sido adjudicado a Osés Construcción.

Todas estas acciones cuentan con el visto bueno de los vecinos: "Si las aceras van a ser más anchas pues mucho mejor para todos", comentó María Domínguez, vecina de la Txantrea. María acababa de salir de comprar ayer por la mañana con un carrito y reconoció que era "un incordio" andar con él "con la calle Santesteban levantada y la acera tan estrecha", pero añadió que "luego nos gusta verlo todo bien, así que nos tenemos que aguantar porque va a merecer la pena".

Inmaculada Rubio también creía que las obras eran necesarias: "Las aceras no eran aceras", indicó. Inmaculada vive en la calle Mendigorria y confesó que los trabajos le están afectando en su día a día: "Sales de casa y casi no tienes acera por donde andar. Además, meten mucho ruido y levantan una polvareda terrible. Te pegas todo el día limpiando el polvo. Dentro de media hora iré a casa y estará otra vez todo sucio", lamentó. Inmaculada también dijo que "hay que pasar por este momento si queremos arreglar las aceras y evitarnos tropezones".

Además de arreglar y ensanchar las aceras, el proyecto va a renovar las redes de abastecimiento y saneamiento y soterrar las canalizaciones de servicios que hasta ahora iban por las fachadas. Fermín Abaigar, vecino afectado, aseguró que las obras "eran necesarias porque las tuberías estaban oxidadas y eran muy viejas y estrechas. Ahora vamos a tener unas buenas tuberías", señaló. Fermín tiene 83 años y expresó que "he vivido toda mi vida aquí y nunca se había hecho nada ni con la red de saneamiento ni de abastecimiento". Según el, tampoco se había hecho nada con las aceras: "Ya ves como están, aparchetadas", subrayó.

Los establecimientos de la zona también apoyan el proyecto, pero algunos de ellos se están viendo afectados por los trabajos que se están realizando en las cinco calles de la Txantrea: "Tenemos un poco menos de clientela porque con las obras el acceso a la tienda está muy difícil y aquí viene a comprar gente mayor", aseguró Edurne Martínez, trabajadora de Frutas y Verduras Bretón. Edurne agradeció que el proyecto arrancase en verano porque "ahora hay menos gente en el barrio y si hubieran comenzado en otoño nos hubiera afectado mucho más".

En la Pastelería Tere también notaban el descenso de la clientela: "Mientras estén trabajando en la calle casi no se puede pasar. La gente es muy mayor, les da miedo venir con las obras y prefieren irse a otro lado", explicaron. Desde la pastelería aseguraron que "hacía falta estas obras", pero apuntaron que "se han puesto a hacer las obras en muchas calles a la vez y la situación es un caos. Vas andando y no sabes por dónde vas a poder salir. Tenían que haber hecho calle a calle y no todas de golpe".

No todos los negocios han perdido clientes: "A nosotros las obras no nos han afectado. Nuestros clientes no vienen con carritos de la compra y les es más fácil", afirmó Diego Garralda, de Inmobiliaria Serantes. Diego sí que comentó que le afectaba "el rollo de los aparcamientos porque ahora es más difícil encontrar sitio", pero consideró que las obras eran "necesarias" y que "van a ser muy beneficiosas".

Luisa, de Puertas Santesteban y también vecina de la Txantrea, consideró que las obras debían extenderse a más calzadas del barrio: "Hay calles que están peor, como la Cintruénigo, y que por ahora han decidido no arreglar. La acera es irregular, tiene baches y es un peligro para los abuelos", denunció.

Calles afectadas. Los trabajos se están llevando a cabo en las vías Mendigorria, Santesteban, Lesaka, Monreal y Etxarri Aranatz.

Trabajos. Las principales labores van a consistir en la reurbanización y en la renovación de las redes de abastecimientos y saneamiento de esas cinco calles. Las obras incluyen ampliación de aceras, pasos de peatones elevados, asfaltado y el soterramiento de canalizaciones de servicios que ahora van por las fachadas.

Otras acciones. Se renovará también la instalación de alumbrado público existente, el mobiliario urbano, la jardinería u el sistema de riesgo. Por último, se cumplirá con la normativa de eliminación de barreras arquitectónicas con los rebajes necesarios.

Previsiones. En principio, las obras finalizarán a final de año.

"Nos tenemos que aguantar estos días porque las obras van a merecer la pena"

Vecina de la Txantrea