Las obras de reurbanización y renovación de redes de abastecimiento y saneamiento en las calles Mendigorría, Lesaka, Santesteban, Monreal y Etxarri Aranatz del barrio de la Txantrea han llegado a su ecuador y se prevé que los trabajos cumplan con el plazo previsto y concluyan para final de año. El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, y miembros de la Corporación municipal han visitado esta mañana las obras que se están desarrollando en la zona desde el pasado mes de junio y en las que ya se perfilan las nuevas distribuciones de las vías, con mayor espacio para el peatón.

El proyecto consiste en la ampliación de aceras, la generación de pasos peatonales elevados, el asfaltado de las vías y la construcción de las canalizaciones para soterrar servicios que hasta ahora iban por las fachadas y estaban, por tanto, a la vista. La inversión asciende a 1.958.530,20 euros, que financian el propio Ayuntamiento de Pamplona, el Gobierno de Navarra a través del Plan de Inversión Local (PIL) y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona.

Las obras comenzaron en junio con los trabajos en la calle Mendigorría y durante el mes de julio, de forma escalonada, se iniciaron las actuaciones en el resto de las vías afectadas. Durante el desarrollo de las actuaciones se han generado algunas incidencias que tienen que ver, principalmente, con el acceso a los establecimientos comerciales de la zona a través de plataformas o con el corte al tráfico de las calles Santesteban, Lesaka, Monreal y Etxarri Aranatz.

Los trabajos en la calle Mendigorría están prácticamente finalizados, a falta del asfaltado de la vía y de algunos otros detalles. En la calle Santesteban, las aceras ya están hormigonadas por lo que se ha mejorado el acceso a los comercios y a los portales mientras se continúa con el resto de intervenciones. En Monreal, Lesaka y Etxarri Aranatz se continúan también con los trabajos, aunando las labores que desarrolla Mancomunidad con colectores y redes de suministro con la obra de ampliación de aceras, estrechamiento de calzada y colocación de mobiliario urbano que desempeña el Ayuntamiento. Además, se ha habilitado como aparcamiento disuasorio una zona cercana, en la calle Ezkaba, para paliar así las plazas que se eliminan en las calles en las que se actúa.

ACERAS MÁS AMPLIAS PARA AUMENTAR LA SEGURIDAD PEATONAL

Los trabajos que se están ejecutando mantienen la sección en las calles, con el mismo esquema de tráfico peatonal y rodado, pero con cambios en las dimensiones, apostando por la movilidad peatonal reduciendo el espacio para la circulación de los vehículos. Se renuevan la totalidad de las aceras, pavimentos y bordillos en el ámbito de actuación, delimitado por la confluencia de las calles San Cristóbal y Mendigorría, la parte norte de esta calle, la calle Monreal, la parte sur de Etxarri Aranatz y la calle Santesteban.

En las calles Santesteban, Lesaka y Monreal, calles interiores de la zona, se reducirá la calzada y se ampliarán las aceras. Hasta ahora la calzada ocupaba 7 metros, con bandas de aparcamiento de vehículos a cada lado, y las aceras tenían unas dimensiones de 1,5 - 2 metros de anchura. Tras las obras ejecutadas las aceras se duplican hasta los 3,5 metros y la calzada queda con 4 metros, manteniendo los dos lados de aparcamiento en línea. La calzada y las plazas de aparcamiento estarán a nivel del bajo del bordillo para garantizar la seguridad peatonal. Además, en mitad de las calles Santesteban y Lesaka se generarán dos pasos de peatones elevados para conectan los recorridos que discurren por las plazas interiores.

Se van a aprovechar estos trabajos para renovar conducciones generales y acometidas de saneamiento, tanto pluviales como de fecales, y de abastecimiento. Se renovará, asimismo, la instalación de alumbrado público, el mobiliario urbano de las calles afectadas, la jardinería y el sistema de riesgo. Y es que se van a implementar también unas zonas de estancia más amplias, que contarán con bancos y elementos naturales. Por último, se cumplirá con la normativa sobre accesibilidad y eliminación de barreras arquitectónicas mediante rebajes en las aceras y mediante la nueva disposición de los elementos urbanos que se ubiquen en la zona.