Navarra Suma no entra a valorar en su totalidad los autos judiciales dictados por la Audiencia Provincial con fecha 29 de enero, y en vez de reconocer que ahora su concejala Carmen Alba tendrá que acudir a declarar como investigada-denunciada por un "presunto delito leve de maltrato" de obra en aquellos altercados, se limita a concluir que "no hay ningún inconveniente en declarar y seguir colaborando con la Justicia". La coalición sigue pidiendo la dimisión del edil de EH Bildu Joxe Abaurrea, que sigue imputado por los sucesos.
La valoración realizada por la coalición de derechas obvia que la Sala ha corregido a la Jueza del Instrucción número 5, en el sentido de que revoca el auto de septiembre de 2020, que había sobreseído la denuncia de Joxe Abaurrea contra la edil Alba. El tribunal de la Audiencia Provincial afirma que "existen a priori indicios de un presunto delito de maltrato" que determinan que deba tomarse declaración en calidad investigada a la Sra.Alba", una diligencia que "hace improcedente el sobreseimiento provisional acordado" en primera instancia.
DIMISIÓN DE ABAURREA
Tras los cuatro autos de la Audiencia Provincial dados a conocer ayer, tres de los cuales han sido estimados en parte por los jueces, Navarra Suma se queda solo con el cuarto, el 44/2021, que mantiene la imputación del edil de EH Bildu por los sucesos: "Lo dijimos en su momento, tiene que dimitir de forma inmediata. La desestimación confirma una vez más la gravedad de las agresiones de Abaurrea contra los agentes de Policía Municipal", indica la coalición de derechas en una nota.
El auto mantiene la apertura de juicio oral contra el concejal abertzale por presunto "delito de atentado contra la autoridad por agresiones a agentes de Policía Municipal", mientras en lo que respecta al rifi rafe con Alba lo considera un "presunto delito de lesiones leves", sin que "existan indicios de un delito de atentado contra autoridad".
Tampoco valora Navarra Suma el auto 45/ 2021 que estima en parte el recurso de la edil de EH Bildu Maider Beloki, y reconoce las "lesiones sufridas por la recurrente", imputando a una agente "al existir indicios de un presunto delito leve de lesiones".
