Los grupos municipales de EH Bildu y de Geroa Bai han acusado a Navarra Suma por favorecer los intereses privados en el proyecto para la creación de una gran superficie comercial en la avenida Zaragoza y han criticado el nuevo procedimiento abierto por el Ayuntamiento después de que el Gobierno foral paralizara el anterior por carecer de un proceso de participación ciudadana,

EH Bildu cree que el equipo de Gobierno “prima los intereses especulativos de las promotoras privadas” y que la celeridad en la tramitación del expediente “ha despertado sospechas y no sólo respecto a la limitación de las opciones del proceso participativo (uso comercial o de oficinas, excluyendo el de vivienda), sino también respecto a quién hay detrás del proyecto”.

Tras analizar la documentación disponible, EH Bildu ha destacado que “el responsable último de la promoción del Plan Parcial que afecta a este polígono no es la administración, sino dos empresas privadas propietarias de terrenos en ese sector”.

En este sentido, el principal partido de la oposición considera que estos intereses “también estarían detrás de la ‘maniobra’ que el equipo de gobierno trata de poner en marcha para condicionar el proceso de participación previo obligatorio antes de completar la modificación del plan”.

Bildu critica que Navarra Suma quiere que este proceso “se reduzca a dos opciones (usos comerciales con más o menos oficinas) obviando la propuesta de uso residencial que impulsamos desde la oposición y negando a los grupos participar en el proceso”.

Por su parte, Geroa Bai cree que el proceso participativo ha sido “engañoso” y que “no es correcto que los dos procesos se estén produciendo simultáneamente dado que primero debemos aprobar la modificación estructurante del plan municipal de Pamplona para posteriormente poder realizar el plan parcial que dependerá de lo que se haya aprobado en la modificación estructurante”.

Geroa Bai recuerda que “uno de los problemas más graves que tiene Pamplona es la crisis del sector comercial de cercanía y ante esta realidad no resulta positivo crear nuevas zonas comerciales”. La formación nacionalista cree el proceso debería repetirse “puesto que no se plantea la opción más ventajosa y necesaria para la ciudadanía que consistiría en permitir también el uso de vivienda”.