Acompáñame es un programa de formación para personas con problemas de salud mental en proceso de recuperación y que participan en una entidad social. La Universidad de Burgos entregó los diplomas a las personas que se han formado en este programa, que cumple en la capital navarra su 2ª edición. Un programa en el que colaboran Mejorana, la fundación Mejorando Cada Día, los Perro Verde y la Fundación Iddeas, con el patrocinio del Ayuntamiento de Pamplona
El objetivo es que se conviertan en agentes de apoyo mutuo para ejercer profesionalmente y que actúen "como compañeros de apoyo en la recepción, proceso de incorporación y adaptación de nuevas personas que se unen a la entidad, así como en el acompañamiento en su proceso de recuperación", detalla el dosier del programa.
"La experiencia es muy positiva, porque estamos dándole forma a una idea que ya llevábamos muchísimo tiempo observando en otros países. Aquí cuando hablábamos de esto nos decían que era una locura. Seguramente lo sea, pero es una locura muy cuerda, porque tiene sentido y porque la ayuda mutua en salud mental es una herramienta simple y sencilla, pero que funciona", explica Cristina García Aguayo, una de las personas que recibió el diploma tras completar la formación. "Se trata de formarse en algo que intuitivamente ya sabes, y darle contenidos y forma a ese conocimiento que tienes de tu propia experiencia", añade.
Una de las claves, asegura, es "saber reconocer qué cosas has hecho tú para que funcionen en tu recuperación. Luego está toda la parte técnica, de funcionamiento, cómo comunicarse... Nosotros no damos consejos. Siempre decimos que no es lo que yo haría, es lo que yo hice. Es buscar esos puntos de conexión en la experiencia humana, que hacen que yo pueda aportarte un modelo de recuperación, en base a lo que a mí me ha pasado", finaliza.
Aspectos formativos
Rebeca Zabaleta, natural de Artajona, se incorporó al máster en investigación de la Universidad de Burgos, que cuenta con una línea de trabajo en educación y salud mental. "Quería hacer el trabajo fin de máster en relación con los agentes de apoyo mutuo. Y vimos que esta figura está muy desarrollada en el ámbito anglosajón, pero muy poco en España, y menos en el ámbito social, porque en el sanitario hay alguna cosa. Cuando acabó el trabajo empezó con la tesis y a diseñar el programa", explica el profesor Fernando Lezcano.
"Se hizo una revisión a nivel internacional de todo lo que hay de apoyo entre iguales a nivel formativo, de programas didácticos", cuenta Rebeca sobre una figura cuyo término en inglés es Peer Support Worker (trabajadores de apoyo entre iguales).
Analizaron 89 programas de todo el mundo y a partir de ahí diseñaron Acompáñame. Un programa formativo de 25 horas con 12 sesiones, más dos adicionales de evaluación (inicial y final). "En la formación se combina teoría y práctica, y fundamentalmente el rol, aspecto muy importante para trabajar los contenidos". El contenido principal, explica Rebeca, es "la propia historia de recuperación".
También han dado mucha importancia a la evaluación para saber "si la persona está preparada para desempeñar esta función de agente de apoyo mutuo", con pruebas teóricas y de role playing "en el que tienen que actuar en una posible situación futura", dice Rebeca, que confirma que están elaborando un Curso Experto con 100 horas de certificación.
"El profesional hace un trabajo profesional, pero la empatía que tiene alguien que ha pasado por una situación similar y es capaz de reconocer lo que está viviendo la otra persona es absolutamente fundamental", destaca Fernando sobre los agentes de apoyo mutuo, una figura complementaria al resto de profesionales de salud mental que, por ejemplo en EEUU, lleva contratándose desde hace dos décadas.