El Ayuntamiento de Lodosa acaba de instalar en el parque de El Medianil dos aparatos de juegos accesibles y adaptados para los txikis con alguna discapacidad, para que también puedan disfrutar en este espacio de recreo y ocio. La idea de este parque inclusivo, explicaba la teniente de alcalde Lourdes San Miguel, salió adelante en los presupuestos participativos de este año.

Recientemente han colocado un arenero y un columpio cesta, dos elementos que han costado 2.691 euros y 1.645 euros respectivamente, por lo que la inversión total ha ascendido a cerca de 4.500 euros.

Los aparatos, insistía San Miguel, cuentan con el diseño y los requisitos necesarios “para que todos puedan jugar y disfrutar juntos”.

Además, y en cuanto a futuras actuaciones en este y en el resto de parques infantiles de Lodosa, la teniente de alcalde aseguraba que estos espacios se someten periódicamente a inspecciones y que van adecuándolos conforme es necesario.

El Ayuntamiento de Lodosa, además, ha renovado parte del tradicional alumbrado navideño que encendió el pasado 11 de diciembre, tal y como explicaba el alcalde Pablo Azcona, y, además, lo ha ampliado en algunos puntos con un presupuesto de 2.100 euros.

En este caso, exponía, han instalado nuevos elementos decorativos en el balcón de la casa consistorial y en el porche de la casa de cultura. El coste de estas luminarias ha sido de 1500 euros.

Por otro lado, también hay luces navideñas en las calles Avenida Diputación, Centro Parroquial y en las entradas al casco urbano por Avenida de la Ribera, Carretera de Cárcar y Avenida de Navarra; en el caso de los viales se trata de ocho elementos estrellados que atraviesan la calle y en los accesos, de 15 báculos que están en las farolas. La inversión aquí ha sido de 600 euros puesto que se trata de un alquiler.

Toda esta nueva iluminación, que cuenta con tecnología led tal y como destacaba Azcona, se suma a la que había otros años en la calle Mayor y en la plaza de la Cruz así como en el Paseo y el kiosko.

Este cambio, que hacía tiempo que venían demandando, lo consideran desde el Consistorio “un gesto de animación de las fechas navideñas en un año que tanto nos está castigando como sociedad”.