- Pablo Azcona, el máximo exponente de LOIU, un proyecto que comenzó hace años para dotar a Lodosa de pluralidad política, se hace a un lado y lo hace satisfecho y con el aval y el respaldo de haber logrado importantes hitos para la localidad.

¿Qué ha sucedido para que decida dar este paso ahora?

-Ha sido un año extraordinario para todos, la pandemia nos ha enseñado muchas cosas y, entre ellas, a saber delegar. A esto se le ha unido el hecho de que en el ámbito personal van pasando las años y las circunstancias y prioridades cambian así como que la entrada en el Parlamento me ha hecho tener que revisar un poco hacia dónde quiero dedicar mi trabajo hacia lo público. Por último, nosotros demandábamos cierto relevo en las personas que están en el Ayuntamiento y después de 14 años es el momento. Así lo hemos sentido todos y yo personalmente.

Entonces, la decisión de dejar paso a Lourdes ¿no estaba premeditada cuando se presentó a las elecciones?

-Uno cuando se presenta lo hace con unas expectativas y compromisos y lo que prima es cumplir con ellos. Creo que lo he hecho y por eso me voy satisfecho. En política es sano y positivo saber delegar y dar el paso a otras personas.

Echando la vista atrás, ¿qué balance hace de su paso por el Ayuntamiento?

-Como experiencia personal, desde luego ha sido la mayor de mi vida en el ámbito profesional. Cuando entré de concejal presentamos una candidatura independiente entendiendo que LOIU iba a ser una herramienta que iba a permitir a distintas sensibilidades políticas e ideológicas estar en el Ayuntamiento. No teníamos una ambición mayor más allá de eso y de ser fiscalizadores de lo que se estaba haciendo. A partir de ahí la gente fue viendo interesante el trabajo que realizábamos y nos fue dando confianza hasta que pasamos a liderar un Ayuntamiento durante diez años y a ser los impulsores de un buen número de proyectos. LOIU aúna fuerzas progresistas y de izquierdas en torno a un proyecto y hemos sabido ocupar, en un plano más social, la centralidad. Lo hemos hecho estando en la oposición con un concejal, cuando hemos necesitado el apoyo del Partido Socialista, y lo estamos haciendo cuando tenemos mayoría absoluta.

Le ha tocado lidiar con diferentes portavoces en la oposición, ¿cómo ha sido esa convivencia?

-Ha ido evolucionado, al igual que nosotros en el Gobierno. Al entrar nos encontramos a un UPN que había estado 12 años gobernando y que, probablemente, no había calculado que podía perder la Alcaldía y menos con una agrupación como la nuestra y le costó coger el papel de oposición constructiva. En la segunda legislatura, aunque cambiaron algunas personas, se mantuvo la dinámica, pero ahora, y en parte forzados por la pandemia, nos hemos dado cuenta de que a nivel municipal está habiendo un intento por remar todos en la misma dirección. Hay diferencias, como no puede ser de otra forma, pero en general siempre he sentido que la oposición ha hecho su trabajo político, con más o menos acierto, y yo he trabajado con ellos con cierta comodidad.

¿Cuál ha sido el peor momento como alcalde y cuál el más gratificante?

-El peor momento fue al mes y medio de llegar a la Alcaldía con la muerte de Félix De Luis Morentin en el encierro, fue muy duro. Y en cuanto a lo más satisfactorio, cualquier agradecimiento de cualquier persona es gratificante.

¿Se le ha quedado en el tintero algo por hacer?

-A nivel global me voy bastante satisfecho. Entré como alcalde en 2011 con una crisis económica brutal y ahora estamos en otra. Eso me ha ayudado a tener los pies en la tierra sobre lo posible, lo deseable y lo que es razonable conseguir. Cuando empezamos ni se me hubiese pasado por la cabeza que a día de hoy el Ayuntamiento de Lodosa casi no tenga deuda, que mantenga el remanente en torno al millón de euros, que hayamos conseguido un modelo presupuestario sostenible, u obras como las de la Cava, el polígono industrial o la implantación del Modelo D en la escuela pública.

Pablo Azcona ha sido la cara de LOIU durante todos estos años, ¿cómo le puede afectar al partido el cambio?

-LOIU no soy yo solo. Estos años he sido el que ha puesto el rostro pero LOIU son un buen número de concejales y concejalas, de exconcejales y exconcejalas y, sobre todo, de personas que nunca aparecen en las fotografías, que no están en un cargo público, pero sin las cuales sería imposible que yo siguiese aquí. No pensemos que LOIU es solo Pablo Azcona porque sin equipo municipal, y sin las personas que están detrás sería imposible llegar a donde hemos llegado 14 años más tarde.

¿Cómo definiría Lourdes, la nueva alcaldesa de Lodosa?

-Es el modelo de lo que nos gustaría; decimos que queremos que Lodosa sea un lugar en el que uno pueda desarrollarse en el ámbito personal, familiar, profesional y social y Lourdes es el ejemplo eso. Tras estudiar su carrera fuera decide volver y ser emprendedora aquí. Además de ser mujer y joven es, probablemente, la persona que mejor preparada llega a la Alcaldía.

¿Cómo ha sido la gestión de este año de pandemia?

-Difícil. El confinamiento fue duro porque había mucha incertidumbre, miedos, problemas de salud y económicos a los que no sabíamos cómo responder. Había que tomar decisiones pero sin precipitarse; se requiere cierta tranquilidad, tener la mirada puesta a largo plazo e ir tomando las decisiones que vayan solucionando las cosas del presente sin perder de vista las consecuencias que pueden tener en el futuro.

¿Qué retos de futuro tiene LOIU?

-El plan que tiene LOIU para Lodosa está en el programa electoral; si lo miras, yo lo hago, ves que el grado de cumplimiento es altísimo. A nadie le va a sorprender lo que vamos a hacer porque en el programa está. Ahora lo prioritario es el Plan de Reactivación, salir de la pandemia; desde el punto de vista sanitario ayudando y poniendo todos los recursos que podamos, pero sobre todo habrá que amoldar las decisiones a las necesidades sociales y económicas de Lodosa.

Siempre ha compaginado la Alcaldía con otro cargo, ¿cómo lo ha llevado y cuál es la mayor diferencia entre la presidencia de la FNMC y el Parlamento?

-Aunque la prioridad era la Alcaldía siempre la he compaginado, a lo que hay que añadir que todos tenemos una vida personal que tenemos que equilibrar. Los dos primeros años fueron muy difíciles, me reduje un 40% la jornada en la cooperativa pero aquello fue muy, muy complicado, a base de meter horas a deshoras y de gastar mis vacaciones para poder estar aquí; acabé cogiéndome una excedencia completa y lo pude hacer porque compaginé el cargo con la vicecoordinación de Aralar en Navarra. La diferencia ahora es básica y es que, siendo presidente de la FNMC, tenía mucho trabajo pero yo me ponía el calendario. Dedicaba muchas horas, subía dos o tres días a la semana a Pamplona, pero yo controlaba mi agenda. Ahora en el Parlamento hay comisiones, visitas o reuniones de preparación y muchas veces no controlas esa agenda sino que viene impuesta. Eso me hace mucho más difícil compaginar la Alcaldía. La carga de trabajo en cualquier sitio es la que uno se quiere imponer, uno elige, pero la diferencia es cuando uno mismo maneja esa agenda y encaja las cosas. En el Parlamento, si se quieren hacer las cosas bien, se requiere de una dedicación muy importante.

¿Qué labor desempeña en el Parlamento? ¿Puede beneficiarle en algo a Lodosa?

-Mi trabajo en el Parlamento quiero que le beneficie al conjunto de Navarra y por supuesto, a Lodosa. Las comisiones en las que estoy tienen mucho que ver con el ámbito municipal y territorial; Comisión de Cohesión Territorial, Comisión de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Comisión de Ordenación del Territorio y Vivienda y Comisión de Cultura y Deporte. La Federación me sirvió para ver y tantear lo que va a venir y el Parlamento me permite estar en las tomas de decisiones. Mi entrada en el grupo parlamentario de Geroa Bai ha ayudado, por ejemplo, a que Lodosa tenga dos enmiendas parlamentarias en dos años y a ser el enlace con el lugar en el que se toman las decisiones.

Geroa Bai forma parte del Gobierno progresista que hay ahora en Navarra, ¿qué nota le pondría a la gestión de estos meses?

-Geroa Bai es parte sustancial del Gobierno en áreas que tienen que ver mucho con lo territorial. La gestión ahora viene marcada por la pandemia y, con luces y sombras, creo que se está viendo una implicación con el territorio, con el hecho de bajar los pies a la tierra, de escuchar e intentar dar respuesta a las demandas sociales existentes. La nota que se le puede dar al Gobierno creo que es razonablemente buena. Desde Geroa Bai, además, mantenemos un pulso para intentar que esa visión transversal de Navarra, de la Navarra de todos y todas, se lleve a la acción de Gobierno. Tenemos nuestros puntos de vista diferentes dentro del propio Ejecutivo pero eso no hace más que enriquecer la propia acción de Gobierno si se canaliza bien. Creo que va a ser fundamental la acción de Geroa Bai para que se siga en la senda de las políticas progresistas, que se tenga en la cabeza lo territorial, el dar servicios esenciales en cuestiones de vivienda o de equilibrio y sostenibilidad medioambiental, y que el desarrollo de Navarra no puede serlo sin el desarrollo de los municipios.

Han dado el pistoletazo de salida a Geroa Socialverdes, ¿cuáles son las perspectivas?

-Se trata de un elemento nuevo en la política navarra. Nace en un momento complejo pero viene marcado por el papel de influencia que tiene que tener Geroa Bai dentro de la acción política del Gobierno. Va a reforzar ideas tan importantes como que las políticas institucional y social se hacen desde abajo, desde el municipalismo. No puede haber una acción de Gobierno integradora sin tener una visión territorial clara, sin compartir con las grandes urbes pero, sobre todo, con el mundo rural, las necesidades. En el ámbito más puramente político, el proyecto refuerza el posicionamiento que tiene Geroa Bai en la sociedad con 62.000 votos en las pasadas elecciones, un importante apoyo gracias al que tratamos de ser un factor fundamental para no volver a inercias del pasado que nos han traído consecuencias nefastas.

Alcalde, presidente de la FNMC y parlamentario. ¿Dónde está el techo de Pablo Azcona?

-Mi techo político es conseguir para Navarra todos los objetivos que he dicho y para eso es fundamental tener proyectos innovadores como Geroa Socialverdes, en el que voy a tener un papel de actor principal ya que soy Secretario de Organización. Es una entidad que acaba de nacer y que hay que formar, algo que es un reto personal. Hacerlo con un buen equipo y lograr ese cambio de modelo social y económico es el reto que me marco.

Para terminar, y tras dejar atrás el que ha sido su cargo durante 10 años, ¿qué reflexión le viene a la mente?

-Uno cuando entra a los sitios tiene que tener proyecto para que las cosas salgan bien. Para estar en una institución a veces necesitas, aunque sea difícil, tener la cabeza levantada para mirar hacia delante y no dejarte absorber por el día a día. Es clave saber que uno no es imprescindible en ningún sitio, que lo importante es que perduren los proyectos, y que somos útiles en cualquier sitio que queramos pero que las cosas, y más en el ámbito de la gestión pública, sin buenos equipos no se consiguen.

"En política es sano y positivo saber delegar y dar el paso a otras personas. Así lo hemos sentido todos"

"Lourdes, mujer y joven, es, probablemente, la persona que mejor preparada llega a la Alcaldía de Lodosa"

"Geroa Socialverdes refuerza que las políticas institucional y social se hacen desde abajo, desde el municipalismo"