Cumplir 600 años siendo testigo y protagonista indiscutible de la historia local y foral bien vale una celebración. Y es que el castillo de Marcilla, erigido en el siglo XV por Mosén Pierres de Peralta y rehabilitado en el año 2012, ha sido pieza clave en el devenir de la localidad y la comarca; ha sido testigo de avatares históricos, hogar para algunas familias, desde ahí se administraron tierras, se gestó el matrimonio de los Reyes Católicos, albergó la espada Tizona y hoy es la sede del Ayuntamiento, servicios sociales, biblioteca, escuela de música así como el escenario para infinidad de actos culturales.

El castillo de Marcilla cumple 600 años

El castillo de Marcilla cumple 600 años

A pesar de que, en palabras del alcalde Mario Fabo, "nos hubiese gustado un acto con mayor esplendor porque la ocasión lo merecía", la fortaleza, epicentro social y cultural de la localidad, ha brillado con luz propia en el 600 aniversario de su construcción. Entre sus pasillos, paredes, torres, fosos y almenas la historia de un castillo que logró evitar su destrucción, bullía por todos los costados.

La banda de música, los gaiteros, dantzaris y gigantes, que poco a poco van retomando su actividad, han recibido a las autoridades que se acercaron hasta Marcilla y que han participado en una extraordinaria visita guiada divididos en grupos y en la que no ha faltado la parada en la exposición de armas ofensivas y defensivas de la Edad Media que Rubén Sáez se encargó de explicar. Allí han estado, entre otros, José Luis Arasti, delegado del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola, consejera de Cultura del Ejecutivo, José Javier Esparza, portavoz de Navarra Suma, Juan Carlos Castillo, presidente de la FNMC, el alcalde Fabo y la corporación marcillesa, antiguos alcaldes de la localidad como Paca Catalán o José Mª Abárzuza, así como representantes de localidades vecinas como Funes y de empresas y agrupaciones marcillesas.

Acto oficial

José Manuel Cantín, edil de Cultura en Marcilla, ha abierto el acto oficial que ha tenido lugar en el salón de actos del propio castillo y que, recordaron, recuperaron con una inversión de 9 millones de euros por parte del Gobierno de Navarra más un millón del Ayuntamiento local.

Tras la intervención de Emilio Garrido que ha hecho un breve pero muy interesante ponencia sobre 'El castillo de Marcilla. 200 año en la cúpula política y económica del Reino de Navarra', ha intervenido José Mª Cambra, presidente de la asociación Amigos del Castillo de Marcilla, entidad que nació en el año 1989 y que luchó durante más de dos décadas por su recuperación.

"La asociación surgió desde abajo porque todo el mundo sentía el castillo, o palacio como lo conocen nuestros mayores, como algo propio. Forma parte del ser y sentir marcillés; sobre el castillo se desarrolla la vida social de Marcilla, es el epicentro urbano y el epicentro cultural". Y es que ellos fueron "la punta de lanza de la reivindicación cívica" con artículos en prensa y revistas, acudieron al Parlamento, organizaron un simposio, provocaron visitas de técnicos y políticos, acudieron a programas de televisión, editaron libros y recuperaron documentos. "La recuperación debía asegurar su pervivencia; ser funcional y ser el motor económico de la zona", ha finalizado Cambra.

Para la consejera Esnaola, siguiente en tomar la palabra, "esta joya es uno de los monumentos más característicos de Navarra; un patrimonio y un legado que hay que preservar y mantener, es un extraordinario recurso cultural y turístico de la Comunidad foral. Que lo que tanto esfuerzo costó no se pierda; aprecio, conservación, sostenibilidad y colaboración entre Administraciones son las mejores recomendaciones para seguir presumiendo de nuestro patrimonio".

Y para terminar, Mario Fabo ha reiterado que el castillo "es nuestra insignia y tiene un valor y potencial como motor turístico, cultural, económico y social. El castillo siempre está presente entre los marcilleses; antes, durante y después de la rehabilitación, pero ahora es cuando cobra más sentido para nosotros. Creo, sinceramente, que fue un acierto que tenga el uso que tiene; ha recrecido la vida cultural pero también la social como lugar de reunión. No quiero terminar sin poner en valor el protagonismo de nuestro castillo y, por ende, el de Marcilla en la historia política del Reino de Navarra y de España; aquí han ocurrido muchos acontecimientos, acuerdos que han marcado el futuro del Reino de Navarra y el de España y por eso, tanto el castillo como Marcilla han aportado su granito de arena para que Navarra y España sean hoy lo que son y solo espero que dentro de 100 o 200 años los que estén aquí celebrando otro aniversario en este magnífico emblema puedan decir lo mismo".