Descendientes de los últimos alfareros de Lumbier se han unido, de la mano del escritor Fernando Hualde y el fotógrafo Joseba Urretabizkaia, en su proyecto editorial conjunto sobre la alfarería, oficio tradicional que fue y estuvo presente en la villa desde la época romana, hasta la primera mitad del siglo XX.

Tras el éxito de su primer trabajo en común publicado en diciembre del 20 sobre las alpargateras roncalesas, se embarcan ahora en su segundo libro en torno a la alfarería de Lumbier con la misma dinámica participativa basada en la implicación vecinal de generaciones que aportan recuerdos y materiales, el legado de sus antepasados.

La recreación fundamental para el soporte gráfico del libro comenzó el pasado viernes con la elección de varios rincones de la localidad en los que se puso en marcha la actividad alfarera. Manos a la obra en un "se rueda" para un libro. Se encendió el fuego, se moldeó la tierra roya de Lardín transportada con caballerías en los cajones de madera de antaño e incluso, se escenificó la venta de los pucheros en la entrada de las casas con un reparto formado por descendientes de los últimos alfareros que hubo en Lumbier hasta que desapareció la actividad.

Claudio Pérez Garde (hijo del alfarero Hilario Pérez Izco), se ocupó de encender el horno, Juanjo Goyeneche (hijo del alfarero Justo Goyeneche Burguete) posó manejando la rueda (torno) de su padre y moldeando una vasija y también el actual alfarero, Luis Machín. Valentín Rebolé Orte, (hijo del alfarero Francisco Rebolé, acarreó la tierra y manejó con destreza el purgador para cribarla. Participaron además, Bibiano y Francisco Javier Beroiz Redín (hijos del alfarero Julián Beroiz Zaro).

Captó asimismo el fotógrafo tolosarra los rostros femeninos que recuerdan que la mujer también trabajó en el gremio, como los de: Isabel Napal Tabar (hija del alfarero Gabriel Napal Aldave) recreando en la entrada de una casa la venta de pucheros. Le acompañaba Presen Iriarte Rebolé (hija de la vendedora de pucheros Gabriela Rebolé, y sobrina de los alfareros Francisco y Juan José Rebolé López). Cargados de recuerdos de infancia en una jornada sin precedentes coordinada por Esteban Labiano.

Este sábado está convocada la vecindad para tomar parte en una fotografía colectiva con las vasijas guardadas en sus casas, que formará parte de la obra. "Viene a salvaguardar los recuerdos de una decena de hijos, hijas, e incluso una hermana, de los últimos artesanos del barro que hubo en Lumbier, actividad que acabó con la llegada del plástico y de la porcelana", expresa Hualde.

Escritor y fotógrafo artístico forman tándem de nuevo para recoger la historia de un gremio de siglos de prosperidad a quienes rinden tributo. Cuentan con la colaboración del Ayuntamiento en un libro "de lujo" que verá la luz el próximo mes de mayo.