- El Departamento de Cohesión Territorial iniciará el próximo año la renovación de la carretera NA-128, que une Caparroso y Mélida, y que registra más de 2.000 vehículos al día, de los que un 7% es tráfico pesado. El proyecto permitirá ampliar su calzada de los seis metros actuales hasta diez, suprimir seis curvas y transformar las intersecciones de acceso a los polígonos de ambas localidades y a la carretera de Rada.

El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, se reunió con la alcaldesa de Mélida, Valle Coca, y el alcalde de Caparroso, Carlos Alcuaz, para informarles acerca del proyecto previsto. El presupuesto estimado de todas las actuaciones se sitúa en siete millones de euros, aunque todavía está a expensas de la revisión final de obra. Los trabajos se desarrollarán en varios años, comenzando en 2021 con una asignación económica de un millón de euros. La vía presenta en el tramo de unión entre los dos pueblos un trazado peligroso con cambios de rasante que generan puntos de escasa visibilidad, algunos coincidiendo con intersecciones con caminos agrícolas, varias curvas con radios pequeños que "suponen giros bruscos y tramos de curvas y contracurvas sin transiciones adecuadas".

El proyecto contempla reducir el 25% de las curvas del tramo, pasando de 24 a 18, y ampliar la plataforma hasta los 10 metros, con dos carriles de 3 metros, arcenes de 1,50 y bermas de 0,5 a ambos lados. Dentro del proyecto se renovarán las intersecciones de acceso al polígono industrial de Caparroso, al polígono industrial de Mélida y la conexión con la carretera NA-5510 a la localidad de Rada. Los tres cruces se resolverán con intersecciones formadas por un carril de desaceleración y un carril de incorporación. En el caso del cruce de Rada, también se dispondrá de un carril central de espera. El proyecto beneficiará las comunicaciones entre las localidades del valle del río Aragón, que contarán así con una mejor conexión con la N-121.